Señor Director:
Esta semana se publicó el informe IPCC sobre cambio climático en nuestro planeta, el que está dirigido a los “tomadores de decisiones”. Como se esperaba, el informe nos muestra que la acción humana es la responsable por el calentamiento global, al menos en los últimos 170 años. Y dos pronósticos reveladores nos plantea: primero, que los eventos climáticos serán cada vez más generalizados, rápidos y extremos; segundo, que dichos eventos serán irreversibles.
El informe es extenso en detalles climatológicos, resultando de sumo interés las informaciones que se pueden extraer para nuestro país, en los próximos 100 años. Nos debe llevar esto a la reflexión, pues los compromisos que tiene Chile al 2050, que es la de neutralizar su huella de carbono, si bien para algunos es suficiente, en el nuevo escenario climático, puede ser todavía poco eficaz. Este aspecto es crucial, porque el informe muestra que Chile será uno de los países sudamericanos más golpeados por el clima futuro, con falta de lluvias, inviernos muy cortos, sequías y una desertificación que será patente en prácticamente todo el territorio.
Este panorama hará cambiar una parte importante de nuestra economía, con impactos en la agricultura, la explotación forestal, la industria manufacturera, la minera y el turismo, por citar algunos sectores y sin considerar que el recurso hídrico más importante, será el agua de mar desalinizada. Para sostener todas estas adaptaciones requeriremos contar con políticos con altura de miras y por qué no decirlo, también una Constitución acorde a esta nueva realidad.
Jorge Manríquez Pimentel