Las palabras del concejal de Chillán, Patricio Huepe (DC), no dejaron indiferente al mundo político local hace unos días.
“Sé que hay gente que tiene temor de declarar, pero si se facilitan las garantías de que no habrá represalias, le aseguro que saldrán a la luz hechos muy graves respecto de otras licitaciones y otros hechos internos”, afirmó el edil a LA DISCUSIÓN el pasado domingo, al ser consultado por las declaraciones que han prestado algunos miembros del Concejo ante la PDI, en el marco de la investigación por el caso led que lleva el Ministerio Público, y que ha sacudido las confianzas al interior del municipio chillanejo.
Es más, durante la última sesión extraordinaria del concejo, llevada a cabo el martes, seis de los ocho ediles plantearon la posibilidad de hacerse parte como querellantes contra quienes resulten responsables, como una forma de estar al tanto de los avances de la investigación y pedir otras diligencias.
– ¿Con qué sorpresas se podrían encontrar los ciudadanos en el marco de esta investigación?
– Al menos yo he recibido tres llamados telefónicos de funcionarios del municipio que esperaban que los llamaran para hacer seguimiento a licitaciones anteriores. También me han hablado de otros temas que no tienen que ver con licitaciones, sino más bien con operativa, ligazón o actos de confianza con el exadministrador municipal, multas que no se cursaron, seguimiento de las licitaciones grandes, mantención de las canchas sintéticas, etc. Espero que se aclare todo, lo importante aquí, como diría el expresidente Lagos, es que las instituciones funcionen. Yo tengo una mala experiencia en este sentido, hace años, cuando era gobernador de Ñuble, me llegó una denuncia contra un exdirector de Obras del municipio: hablé con el jefe de la investigación, se grabó una prueba, y al final no pasó nada. La persona salió al final del municipio porque fue mal calificada. Ojalá lleguemos al fondo del asunto, para tranquilidad de los funcionarios principalmente. Eso nos permitirá servir mejor a la comunidad, que es el objetivo del municipio. Yo creo en los servidores públicos, pero si aquí se ha faltado a la honestidad y se han cometido delitos, estos deben ser juzgados, y en esta búsqueda de la verdad estamos juntos al menos seis concejales, yo no quiero aparecer como el llanero solitario.
– ¿Han cuestionado ustedes el exceso de confianza del alcalde Sergio Zarzar en su equipo más cercano, que derivó en esta falta de fiscalización?
– Yo no he tenido la oportunidad de decirle eso al alcalde, pero mi colega, Jorge Vaccaro, sí. Él mismo (Vaccaro) intentó hace un año remover al administrador, pero no consiguió los votos. Sin duda hubo un exceso de confianza, todo lo interno lo manejaba el administrador. Él influyó para que nombraran a la asesora jurídica, por ejemplo, y paralelamente, no se han cursado multas.
– ¿Hubiese preferido que la investigación interna la continuara el juez Ignacio Marín en vez de traspasarse a Contraloría?
– El juez Marín estaba un tanto limitado, pues el sumario solo involucraba el caso led. Si él descubría otras cosas, debía comunicárselas al alcalde, a los concejales y al Ministerio Público, pues él no podía investigar. Confío en que la investigación de Contraloría pueda ser más amplia y aclare a fondo ésta y otras situaciones que pueden estar hoy con poca transparencia.
“Confiamos”
– ¿Hacen uds. como concejales un mea culpa respecto de su rol fiscalizador? ¿O las herramientas con las que cuentan no son suficientes para efectuar dicha labor?
– Hubo algunas cosas que yo dije en el momento de la votación, como que no estaba de acuerdo con las ponderaciones de diversos ítemes, porque podían constituir ventaja para Itelecom. Pero nosotros nunca tuvimos acceso a las bases de la licitación, solo las conocimos en el momento de la evaluación, por lo que pudimos opinar ex post. También explicité que no tenía conocimiento técnico para verificar ciertos aspectos de las ofertas, había que confiar en lo que nos decía el organismo técnico municipal. En cuanto a la prelación, que fue el punto con el que el concejal Camilo Benavente recurrió a Contraloría, también estaba en orden y terminó por convencernos el informe del contralor. Por cierto que hay temas en los que me gustaría haber opinado ex antes. Confiamos en los organismos del municipio, además, con la presión de que si no hacíamos uso ahora de los recursos, los perderíamos debido a la pandemia. Por todo eso, yo voté favorablemente.
– ¿Cómo ha afectado esta investigación las relaciones al interior del Concejo y del municipio?
– Ha afectado, por supuesto, sobre todo en la confianza interna. Pero hay que superarlo.
