Histórico, y a ratos intenso, con un fuerte lobby del gobierno desplegado en el congreso, que incluso fue denunciado por algunos diputados; fue el debate en torno al proyecto de ley que busca autorizar, por única vez, a los afiliados del sistema de AFP, retirar hasta el 10% de los fondos de pensiones, en el marco de las consecuencias económicas que ha traído la pandemia por coronavirus.
La iniciativa, que requería un quórum de 3/5, alcanzó 95 votos favorables; 25 en contra y 31 abstenciones, por lo que podrá continuar su tramitación. Hoy, según anunció el diputado Matías Walker, debería ser visto en particular en la comisión de Constitución para ser nuevamente votado en sala y despachado a la brevedad al Senado.
La iniciativa establece un monto máximo a disponer por parte de los afiliados de 150 UF, es decir, alrededor de $4 millones 300 mil; y un mínimo de 35 UF, lo que corresponde a $1 millón.
La entrega de estos dineros, según contempla el proyecto, que refunde varias mociones impulsadas por diputados de oposición; se hará a través de dos cuotas: un 50% entregado en un plazo máximo de 10 días hábiles tras presentada la solicitud ante la respectiva AFP; y la otra mitad, en un plazo de 30 días hábiles a contar del desembolso anterior.
Asimismo, la iniciativa contempla un mecanismo para que estos montos puedan ser restituidos, con el objetivo de paliar un posible perjuicio en las pensiones de los afiliados. Esto, a través de la creación de un fondo colectivo solidario de pensiones, el cual será financiado por medio de aportes de los empleadores y del Estado, y que deberá ser propuesto por el Presidente de la República.
A favor
“Éste ha sido un debate histórico, pues se logró reconocer que el sistema fracasó y no por la pandemia. La estrategia del Ejecutivo ha sido ineficaz, e incluso, mal calculada según los mismos ministros de gobierno. Se nos ha acusado de populistas, sin atender las reales necesidades de las personas. El 10% no es para irse de vacaciones o comprar un vehículo, sino para necesidades manifiestas, con fondos a los que los chilenos tienen legítimo derecho”, sostuvo la diputada PPD, Loreto Carvajal.
El DC Jorge Sabag, en tanto, manifestó que “La economía debe estar al servicio de las personas y no al revés. Las medidas del gobierno han sido insuficientes, por ello, como último recurso se presentó este proyecto como medida transitoria, que permitirá que 11 millones de chilenos puedan retirar parte de sus ahorros, si así lo deciden, de manera de impactar a la clase media, para la cual no ha alcanzado el sistema”.
Carlos Abel Jarpa, por su parte, dijo que “Voté a favor, porque ésta es una medida extrema y las personas están conscientes de ello, así lo han demostrado las encuestas, que tanto gustan a este Gobierno”.
Añadió que “en esta votación quedó claramente establecido, quiénes somos los que estamos a favor de modificar las AFP y terminar con este sistema abusivo de los últimos 40 años; y quiénes están por mantenerlo. La situación que hoy atravesamos se ha tornado insoportable para las familias chilenas, y el gobierno no ha sabido dar respuestas a las necesidades de las personas, postergando decisiones claves e implementando medidas improvisadas”, afirmó.
En contra y abstención
El diputado Gustavo Sanhueza (UDI), en tanto, si bien rechazó el proyecto, se sumó a las críticas que parte del oficialismo ha manifestado al actuar del gobierno, por la presentación inicial del Plan de Protección a la Clase Media.
“Si bien el Ejecutivo mejoró la propuesta durante la presente jornada, el manejo político de los ministros ha sido foco de críticas por parte de la bancada de la UDI. Al gobierno le ha costado comprender que la política pública a veces no debe estar decorada por tanto tecnicismo, restricciones o guarismos en las propuestas. El sentido de urgencia debe ser abordado de una forma más simple, directa y masiva en términos de cobertura, sobre todo, cuando se trata de un sector históricamente postergado como la clase media”, sostuvo.
El legislador recalcó que “el costo debe venir del Estado, no con cargo a los ahorros de las personas ni al sobre endeudamiento futuro de las familias”, en alusión a su rechazo al proyecto.
El RN Frank Sauerbaum, en tanto, se abstuvo.
“El Gobierno no presentó todas las peticiones que RN había hecho, solo una parte. Esperamos que siga planteando alternativas de financiamiento y no de endeudamiento. Queremos transferencias directas, por ejemplo, para pagos de colegiaturas o dividendos, para no recurrir a los fondos de pensiones, pues afecta las jubilaciones. Esperamos poder mejorar el proyecto, presentando indicaciones. En la medida que el gobierno presente alternativas de financiamiento reales, este proyecto podría no prosperar”, advirtió.