Hasta el próximo 7 de julio se puede apoyar una Iniciativa Popular de Norma para corregir, eliminar, reemplazar, modificar o sumar artículos al anteproyecto constitucional.
En total, se presentaron 1.309 iniciativas, las que se hicieron públicas el pasado 22 de junio en el sitio web secretariadeparticpacion.cl .
Estas deberán recolectar firmas digitales utilizando Clave Única, a través de la plataforma de Iniciativas Populares. Cada persona puede respaldar hasta un máximo de 10 iniciativas en total, y aquellas que alcancen las 10 mil firmas en al menos cuatro regiones, podrán ser discutidas en el Consejo Constitucional.
Hasta el momento, las iniciativas que lideran la votación son de grupos ligados a la oposición.
La que hasta el momento tiene más adhesión es “Con mi plata no, protejamos nuestros ahorros previsionales”, presentada por la Organización Con mi Plata No, con 9.286 firmas.
Le siguen “Respeto por las actividades que dan origen a la identidad de ser chileno”, presentada por la Organización Corporación Vive Chile Rural, con 8.253; “Por un Estado sin pitutos”, de la Organización Pivotes, con 7.679; “Una policía que nos protej”a, de la Organización Yo Apoyo a Carabineros, con 6.117; y “Chile por los animales”, de la Organización Fundación Derecho y Defensa Animal, con 5.781 firmas.
Deber Constitucional en la acción educativa
En el área Educación, por ejemplo, se han presentado iniciativas en distintas áreas. Una de ellas, la planteó el Consorcio de Universidades del Estado de Chile. Se trata de “Educación Pública para Chile” (nº 5127), en orden a reconocer al Estado como proveedor de educación pública, laica, pluralista y de calidad, en todos los niveles de enseñanza y territorios de Chile.
También ha habido propuestas del mundo académico. El filósofo y educador, Germán Gómez Veas, presentó la iniciativa denominada “El Deber Constitucional de la Acción Educativa” (nº 1091).
“Me motivó el hecho que los expertos propusieron un texto que incluye ocho deberes constitucionales, lo cual es una novedad. La anterior Convención Constitucional no pensó en deberes constitucionales, y la actual Constitución vigente tampoco tiene. Se trata de una innovación súper interesante, sin embargo, en estos ocho deberes no hacen ninguna mención a la educación, un problema que tenemos desde hace a lo menos tres décadas en Chile. Es necesario como país dar alguna herramienta, algún camino, algún marco para poder repuntar a un nivel decente de eficacia educativa”, sostuvo Germán Gómez.
Agregó que “los expertos dieron a los ciudadanos que ejercen funciones públicas una responsabilidad en cuanto a la probidad administrativa en los ámbitos del servicio del Estado. Y el servicio educativo, en mi opinión, tiene que tener una primerísima prioridad, porque son las personas, en este caso los alumnos y jóvenes bien educados, los que van a renovar las instituciones con su modo de ser y de hacer, que es precisamente el foco que tiene la propuesta que he realizado”.
Según Gómez, “la autoridad y el prestigio, el respeto a la labor docente, han decaído en nuestro país a niveles que nunca se habían visto. Hoy día es muy simple faltarle el respeto al profesor por parte de alumnos y también de apoderados. El prestigio y la autoridad docente han decaído muchísimo, y creo que es necesario recomponer ese prestigio. Eso se recompone, en mi opinión, cuando se puede visualizar con claridad objetiva la acción educativa, el quehacer educativo. Por eso lo llamo ‘el deber educativo’, por una parte. Pero por otra, también es necesario que todos comprometamos como país un marco mínimo de acción educativa, de manera que la eficacia educativa también encuentre un norte, un objetivo, un propósito”.
En resumen, dijo, “esta iniciativa apunta, por una parte, a que los profesores y las educadoras tengan o asuman el deber de educar en torno al carácter de los escolares respecto de la verdad, el bien y la belleza, que son las propiedades de la realidad. Porque sin verdad y sin bien, los alumnos no aprenden nada, y entender que la belleza tiene una profundidad interior superior es clave para el mundo actual y el futuro”.
También destacó que “se han presentado varias iniciativas en torno a la ley de enseñanza o el derecho a enseñar, también el derecho preferente de los padres a educar a sus hijos. Pero ‘de deber’ solamente he visto ésta. La gente todavía está acostumbrada a hablar más de derechos que pronunciarse respecto de algún deber”
