Un aumento constante, pero lento de casos de Covid-19 en la región de Ñuble confirmaron las proyecciones realizadas por el equipo de expertos de la Universidad de Concepción en un nuevo reporte sobre la evolución de la pandemia.
Así lo confirmó el reciente informe basado en un modelo ajustado al 7, 14 y 21 de diciembre que considera distintos escenarios con distintas tasas de contagio y porcentaje de muestreo de la población variable de acuerdo a la cantidad de nuevos infectados diarios.
El modelo mantiene la proyección de la semana anterior en la región de Ñuble, donde cada infectado actualmente está contagiando en promedio a 1.11 personas (R efectivo), lo que refleja que la pandemia aún no está controlada.
En palabras del ingeniero y doctor en Matemáticas, Roberto Molina en Ñuble, “vemos que no cambió absolutamente nada con respecto a la semana anterior. Nuestra proyección es la misma, eso significa que los casos vienen aumentando muy lentamente que es lo que hemos visto hace más de un mes casi que vemos esta tendencia al alza, pero muy lenta. Estamos cerca de los 60 casos diarios, creo que la semana pasada también tuvimos eso, pero es porque el aumento es lento”.
Para el experto la situación de Ñuble es preocupante por el alza constante que mantiene un estado de alerta. Sin embargo, recalcó que hay que estar atentos a lo que vendrá posterior a la Navidad, producto de la mayor movilidad que existe en estas fechas por motivo de las compras.
“En Ñuble si bien al día de hoy están relativamente tranquilos el peligro es lo qué va a pasar, cuál será el efecto de la Navidad. Ñuble se mantiene en este estado de alerta, lo preocupante es que siempre sea al alza y que no sea un descenso, pero al menos no se ha visto la misma situación que en Biobío. Lo que sí el peligro de Ñuble y el de todas las regiones, es que todavía no vemos el efecto de la navidad, de lo que va a pasar esta semana en Biobío, y ya tenemos datos terribles con los datos del fin de semana y de la semana pasada, lo que se venga en estas dos semanas va ser aún peor”, enfatizó.
Respecto a las medidas intermedias que se han aplicado en Chillán- Chillán Viejo, como la restricción vehicular durante los fines de semanas y feriados, además de la cuarentena que rige por la fase 2, el ingeniero indicó que “al menos lo que veo aquí, es que frenan los casos, en el sentido, de que no disminuyen pero ralentizan el aumento de los casos, es decir, que no haya una explosión de éstos”.
A nivel provincial, un dato que ha llamado la atención del equipo de proyecciones UdeC, es la presión que han generado en las cifras tanto Punilla como Itata que en el último tiempo han influido en el aumento de contagios en la región.
“Diguillín es la que habitualmente mueve a la región, pero en las últimas semanas esta provincia se ha mantenido más o menos constante. Lo que mueve a la región, en el sentido de esta pequeña alza, fue Punilla e Itata principalmente. En general, ellos tienen muy pocos casos, y ahora en los últimos 10 días vimos unos datos que ya la semana pasada eran anómalos, que fueron como dos días con más de 10 casos, pero ya esta semana se confirmó y tenemos al menos cinco días con varios casos. Eso creo que empujó esta pequeña alza regional, porque siempre es poco la influencia de Punilla e Itata. El miedo es que este aumento que vemos ahora se mantenga en el tiempo”, sostuvo.
Molina destacó que ha bajado la tensión en el sistema hospitalario de la región, al existir una baja en la demanda de camas críticas.
“Lo que veo también como una buena noticia es que el uso de las camas UCI disminuyó, en dos semanas cayó, porque llegaron igual a un máximo histórico en cuanto al uso de camas. Creo que superaron las 30 un día, tal vez fue probablemente porque recibieron pacientes desde Biobío, me imagino por los traslados que pudieron darse. No tengo información sobre desde y hacia dónde se va la gente, pero al parecer ya dejaron de recibir pacientes y eso descomprimió un poco”, dijo.
De acuerdo a su análisis, la región del Biobío se mantiene en estado crítico con un alza permanente de contagios. El modelo, durante el último escenario, indicó que cada infectado ha contagiado en promedio a 1.20 personas (R efectivo).
“Concepción en este momento es un desastre. La región del Biobío ha estado peor que nunca, llevamos dos meses de alza muy peligrosa, algo que veíamos venir, pero que no cambiaron nada las medidas, porque desde que se liberó la cuarentena y se aplicó el toque de queda más adelantado, lo único que se ha hecho es tratar de reforzar las medidas que ya tenemos, pero ya se vio que no son suficientes en Concepción. Ahora se sumó también durante todo este mes Los Ángeles y eso hace que la región en su conjunto se disparen las cifras. Arauco se mantiene más o menos constante”, describió.
Respecto al cordón sanitario en Concepción,”al menos lo que vemos en los datos es que nunca tuvo el efecto esperado, la gente pasa igual. Nunca vimos una disminución notoria, pero bueno nosotros teníamos un cordón que era todos los días, la gente iba a trabajar igual, o sea, todos pasaban igual el cordón. No sé si un cordón único durante fiestas puedan tener un efecto, es difícil verlo en los datos, porque los cordones son muy cortos, son datos del día y no alcanzamos a ver una continuidad”.
En la región Metropolitana también se ha registrado un alza constante del virus, donde cada infectado actualmente está contagiando en promedio a 1.29 personas (R efectivo).
“Desde principio de diciembre, las últimas tres semanas, también aumentaron el número de casos, su carga viral está aumentando. Ahora los datos confirmaron que vienen con un alza importante y esperamos que no se dispare, puede que sea lo más probable cuando veamos el efecto de la Navidad, pero esperemos que no sea tanto. En Santiago, vemos que los casos están aumentando en forma peligrosa con todas las consecuencias que ello implica.Si aumentan el número casos aumentan el número de hospitalizados y no tenemos dónde trasladar pacientes desde otras regiones, eso también nos complica a nosotros, que estamos al límite de la capacidad hospitalaria”.
