Los buenos indicadores epidemiológicos que registra la región de Ñuble están dando un respiro a la primera línea que combate a la pandemia en la red asistencial, tras meses intensos por la alta demanda de contagiados que requirieron hospitalización.
Hoy la realidad es que producto de las condiciones favorables se dio inicio a la reducción de las camas críticas destinadas a pacientes Covid, para retomar las atenciones hospitalarias que fueron postergadas por la crisis sanitaria. A esto se suma la eventual disminución del personal de salud contratado como refuerzo para atender la pandemia, ya que para fines de septiembre finalizarían sus convenios.
De acuerdo al Servicio de Salud Ñuble, más de 800 personas fueron contratadas para sumar esfuerzos en la lucha contra el coronavirus en los diversos establecimientos de la red en la región.
Ante la eventual reducción del personal, gremios regionales de la salud solicitaron mantener al menos la mitad de la dotación para continuar la cobertura de atenciones en el contexto de pandemia y otras demandas de la salud en la que existe un déficit de funcionarios.
“A partir del 30 de septiembre y a fines de octubre comenzarán a terminar los contratos de las personas que fueron contratadas como refuerzos Covid, una serie de funcionarios, técnicos y administrativos que fueron, en su gran parte, a la labor asistencial pero también a labores administrativas propias de lo que es la gestión de salud. Se ha solicitado que se mantenga alrededor de 350 a 400 de estas personas como funcionarios de la red, porque si bien la pandemia ha bajado en cuanto a números, no estamos exentos de algún rebrote o de alguna situación que complejice el panorama sanitario en Ñuble respecto al Covid-19, y también para cumplir algunas otras labores, porque lo que vimos con la pandemia es que se develó la situación precaria de la salud pública en cuanto a lo que es recurso humano”, explicó Claudio Martínez, presidente de la Federación Democrática de Profesionales Universitarios de la Salud (Fedeprus) Ñuble.
Destacó que existe un compromiso por parte de la directiva del SSÑ para mantener gran parte de los refuerzos Covid.
El dirigente agregó que la situación favorable de la pandemia permitirá a los funcionarios que desempeñan labores administrativas y de gestión y se encuentran en modalidad de teletrabajo por ser del grupo de riesgo (enfermos crónicos, de edad avanzada, inmunodeprimidas o que no cuentan con una red de apoyo para el cuidado de sus hijos), retornar a la presencialidad de manera paulatina. “Creemos que vamos a terminar este periodo con mejor recurso humano que el que teníamos antes”, dijo.
Desde el Colegio Médico de Chillán enfatizaron que se debe contar con una capacidad de respuesta adecuada ante un eventual aumento de casos de Covid-19, considerando la circulación de diversas variantes y las mayores libertades que se han otorgado en el último tiempo.
“El mensaje que han recibido los directores de los hospitales, a través del país, es que una vez terminado el estado de emergencia estos contratos tienen que terminar. Lo que ocurre es que muchos de los profesionales que trabajan en testear, trazar y aislar están contratados de esa manera (honorarios) y si perdemos la capacidad de testeo, trazabilidad y aislamiento, el manejo de la pandemia no va tener el mismo resultado que ha tenido hasta ahora”, sostuvo el presidente del gremio, Juan Pedro Andreu.
“Nos preocupa la capacidad de respuesta que tengan los hospitales, específicamente el hospital Herminda Martín y el Hospital San Carlos, respecto a ampliar las camas críticas que ya se han reducido para enfrentar un aumento de casos. Nadie quiere y espera que eso ocurra, pero no es solamente una variante de preocupación que existe”, agregó.
Desde la mirada del representante de los galenos, el personal que fue contratado exclusivamente para Covid-19, se debe reconvertir para atender otros requerimientos del sistema postergados por la pandemia.
“Lo que se debería hacer es reconvertir esos cargos tanto sean técnicos o profesionales en pagar la deuda sanitaria, de la pérdida de oportunidad de atención que han tenido las personas durante la pandemia y eso como señal no lo vemos como Colegio Médico. No es solo la lista de espera, problema quirúrgico, aquí se han dejado de ver por la pandemia, y esto no es responsabilidad de los servicios ni tampoco de las personas que se han limitado a asistir a sus controles, hay que entender que estamos en una pandemia donde hay miles de muertos, pero durante todos estos meses las patologías crónicas no transmisibles no han estado bajo control y eso es lo que nos preocupa”, sostuvo.
A juicio del presidente regional de la Federación Nacional de Trabajadores de la Salud (Fenats), Carlos Mora, la pandemia no ha terminado, por lo que se requiere contar con equipos de refuerzo, que además, debieran ser reubicados para reemplazar a los funcionarios que han tenido que postergar sus periodos de vacaciones a raíz de la emergencia.
“Es necesario mantener el personal de refuerzo hasta que se termine la pandemia, porque no sabemos si los contagios pueden aumentar, desconocemos el impacto que tendrá la variante Delta. Acá en el hospital en este minuto se están manteniendo el personal todavía, hasta creo fines de septiembre, y ojalá se mantenga, porque ese personal se sacrificó durante toda la pandemia. (…). Además, hay funcionarios también, que estuvieron con turno especial y que van a retornar, hay vacaciones acumuladas de dos años, entonces, creo que hay que tener ese personal hasta fin de año y ahí ir viendo”, expresó.
La directora de comunicaciones de la Federación Nacional de Asociaciones de Enfermeras y Enfermeros de Chile (Fenasenf), Gloria Díaz, defendió la permanencia de trabajadores de refuerzo, argumentando que la región y el país deben estar preparados ante una eventual alza de casos.
“Falta una mirada estratégica desde el Ministerio de Salud, porque ellos mismos nos han dicho que es posible que pudiésemos tener nuevas olas, sobre todo, en el contexto que vienen circulando nuevas variantes de Covid-19 y variantes que incluso han reportado alzas catastróficas en Europa, incluso a 90 días de que ingresaran. Entonces, estamos viviendo las Fiestas Patrias, hay cada vez mucho más desplazamiento, por lo tanto, es posible que tengamos un rebrote importante”, sostuvo.
La dirigente enfatizó que el sector ha enfrentado por años un déficit de personal que podría solucionarse con la permanencia de los funcionarios de refuerzo. “Ellos vinieron a solucionar una brecha histórica que teníamos. Siempre hemos trabajado con menos recursos. Toda esta contratación vino a dar respuesta a la demanda sanitaria por la pandemia y también nos ayudó en algunos servicios a mantener una atención segura. Está súper estudiado que a mayor dotación disminuye el riesgo de muerte”, recalcó.
“Es necesario considerar que durante meses, prácticamente casi dos años, ese personal ha estado combatiendo la pandemia. Se nos ha aplaudido, se nos están ofreciendo homenajes ahora en la Parada Militar, sin embargo, no se nos dan condiciones dignas de trabajo. Hoy, que pudiésemos tener la posibilidad de retribuir de manera concreta, no se le da trabajo digno, no se da descanso a los funcionarios, incluso, se les despide. Hay una incongruencia por parte del gobierno”, añadió.
Retorno seguro
Los representantes de los trabajadores de la salud y el SSÑ elaboraron en conjunto un plan de retorno seguro para que a partir del próximo 1 de octubre los funcionarios puedan volver de manera progresiva a la presencialidad en los centros hospitalarios de la región.
“El plan de retorno comenzaría a operar desde el 1 de octubre, en donde la gente va a ir volviendo en la medida en que también va contando con redes de apoyo como colegios abiertos para sus hijos, vacunación de los chicos, y una preocupación permanente por los funcionarios con problemas de salud crónica, a quienes se harán evaluaciones permanente de ellos, la gente que está con un riesgo alto va a permanecer en teletrabajo y los que puedan estar con un riesgo moderado o leve van a retornar a sus labores con la preocupación permanente de evaluación médica para ellos”, explicó el presidente regional de Fedeprus, quien aclaró que “no es volver a la normalidad, sino tratar de ir dotando a la red de más presencialidad”.
El trabajo presencial también estará marcado por los aforos según lo establecido en los protocolos.
“No podemos tampoco terminar trabajando hacinados en lugares donde la labor es más administrativa que asistencial o de atención directa, entonces eso se va a evaluar. También está la instalación de turnos rotativos donde la gente va a poder estar optando por la presencialidad y el trabajo a distancia”, indicó.
El dirigente manifestó que otro de los asuntos en que trabajan es en conseguir un fuero laboral y un descanso compensatorio de 15 días para los funcionarios que han combatido la pandemia de manera ininterrumpida desde marzo de 2020.
“Nos preocupa el cansancio de los trabajadores, el desgaste emocional y físico que también lo estamos abordando, a través de un proyecto de ley que hemos generado como federación y confederación para poder otorgar un descanso compensatorio de 15 días para los funcionarios de salud, una vez que finalice la pandemia y termine la alerta sanitaria y ellos puedan optar a tener días de vacaciones para poder también aportar a la salud mental, que es la otra pandemia que se está instalando en el país. También incluye la posibilidad de que no echen a las personas, no exista una suerte de libertad para terminar con los contratos de los funcionarios”, explicó.
Redistribución de los equipos
El director del SSÑ, Ricardo Sánchez, informó que durante la emergencia sanitaria, más de 800 personas se integraron como refuerzos en los establecimientos de la red asistencial en los momentos de mayor demanda; principalmente para apoyar las estrategias que permitieron contener la pandemia en los momentos más complejos, contribuyendo al desarrollo de iniciativas clave como la vacunación, la búsqueda activa de casos, la hospitalización domiciliaria y la complejización de camas, que permitió aumentar las áreas críticas para el tratamiento intensivo de pacientes con complicaciones del Covid-19.
Afirmó que evalúan una disminución de estos refuerzos de forma gradual, y por ahora, a raíz de la buena condición epidemiológica que goza la región, el personal ha sido redistribuido en otras tareas en el área de la salud.
“Hasta este momento los equipos se han redistribuido, cumpliendo funciones en otras áreas que se han reactivado en el último tiempo, como la actividad quirúrgica, permitiendo realizar, por ejemplo, una mayor cantidad de cirugías que estuvieron suspendidas en los meses más complejos de la pandemia. En este mismo sentido, se estudia una reducción paulatina, de acuerdo al buen momento epidemiológico que vivimos y a la proyección de algunas estrategias de contención que se mantendrán durante los próximos meses, como la entrega de fármacos a domicilio, la hospitalización domiciliaria y un aumento de camas críticas que se mantendrá, dejando más del doble de lo que existía en la región antes de la pandemia”, subrayó.
El directivo sostuvo que la reducción del personal de salud no afectará, en ningún sentido, la capacidad de respuesta ante eventuales alzas de contagio. “Todos los establecimientos cuentan con un plan de escalamiento y desescalamiento, que permite reconvertir equipos y complejizar camas cada vez que sea necesario, como ha ocurrido hasta ahora”, señaló.
Respecto al retorno a la presencialidad, Sánchez precisó que la red de salud inició un trabajo exhaustivo para estandarizar los criterios y promover un retorno seguro. “El actual escenario epidemiológico permite muchas más libertades y en ese sentido, también es más seguro propiciar el retorno de quienes se han mantenido en resguardo por una condición de salud o por el cuidado de los hijos menores”.
“Se analizarán todas las variables y se estudiarán los casos especiales, pero hoy la regla general, es que la mayoría de los funcionarios están actualmente cumpliendo sus funciones, con un porcentaje menor que se mantiene en teletrabajo, dado por alguna condición de riesgo”, cerró.
Texto: Antonieta Meleán| Susana Núñez
