Una difícil reactivación de la actividad económica anticiparon ayer los gremios de empresarios y emprendedores de la región, como reacción a las declaraciones del ministro de Economía, Lucas Palacios, quien el miércoles sostuvo que en algunas zonas del país, como Ñuble, Magallanes o Arica, se están comenzando a reactivar poco a poco algunos sectores.
En sus últimas intervenciones, el secretario de Estado ha insistido en que la disminución de contagios en algunas zonas del país ha permitido a ciertos sectores ir retomando lentamente el movimiento.
Al respecto, Alejandro Lama, presidente de la Cámara de Comercio de Chillán, recordó que la capital regional fue una de las primeras ciudades donde se decretó cuarentena y cordón sanitario, y que pese a que dichas restricciones ya se levantaron, el comercio no prende, estimando una caída en las ventas de 60-80 por ciento.
“Nosotros pagamos el noviciado y fuimos los primeros afectados con el coronavirus, por eso el cordón y la cuarentena, que nos tuvieron bastante complicados, por lo tanto, pareciera ser que ese sacrificio inicial valió la pena, porque hoy estamos sin ninguna de estas dos restricciones, pero el comercio no prende”, afirmó el dirigente gremial.
Lama comentó que “las ventas han estado muy malas, la llegada de consumidores de otras comunas ha sido lenta, el consumidor sigue siendo muy cauto, todavía no se ve una demanda como en los niveles previos a la pandemia, y las cifras que arrojan los comercios es de una caída en las ventas de 60-80 por ciento; el que mejor está es porque le cayó a la mitad. Va a costar que esto repunte, el consumidor está muy restringido a la hora de invertir o comprar, está postergando todo, hay incertidumbre, no hay claridad del futuro cercano, está complicado”.
El timonel del comercio añadió: “tenemos la ventaja que hoy nos podemos desplazar tranquilamente, los negocios pueden abrir, no hay restricciones en el traslado ni la apertura, el sistema productivo está funcionando, pero la demanda está caída” .
Emprendedores en crisis
Carlos Pinochet, presidente de la asociación Emprende Punilla, reconoció que “hay una leve reactivación económica en Ñuble, muchas pymes han logrado mantener un flujo de ventas mínimo que les ha permitido cumplir con sus obligaciones financieras, o parte de ellas”, pero advirtió que “el ministro no enuncia que esta reactivación no llegó a quienes más la necesitan, los emprendedores no calificaron para los créditos Covid-19 (Fogape). Según estimaciones de nuestro gremio, más del 65% de ellos tendrá que terminar su actividad económica, es decir, quebrarán”.
Pinochet manifestó que “es urgente que el gobierno nos escuche y lance un crédito Covid 2.0, pero esta vez, que el Ejecutivo fiscalice realmente a la banca y la exhorte a entregar liquidez a los más pequeños, la flexibilidad a la hora de evaluar debe ser mayor”.
El dirigente sancarlino recordó que “muchos tampoco califican para ninguna de las ayudas sociales entregadas por el Gobierno, debido a su condición de independientes, actualmente están completamente a la deriva”.
Planteó que “una fórmula que hemos pensado en nuestro gremio, es un crédito universal de $1.000.000 para todos aquellos a quienes la banca rechazó su solicitud; esto no solucionará todos los problemas, pero al menos daría algo de oxígeno u oportunidad de reinventarse y emprender en otro giro”.
Anhelo
Desde la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) sede Chillán, su presidente, María Eugenia Rojas, expresó que la reactivación es un anhelo del gremio.
“Estamos en una etapa de estabilizar los procesos productivos, ya que estuvimos mucho tiempo con medidas sanitarias que paralizaron el sector”, expuso la dirigente.
Rojas sentenció que “la reactivación que señala el ministro es también nuestro anhelo, por tanto, esperamos seguir contando con el apoyo permanente del gobierno para hacer frente a esta pandemia que nos acompañará por mucho tiempo”.
