Una crítica situación viven los dueños de restaurantes y locales de entretención, quienes pidieron flexibilizar las medidas en fase 2 para volver a abrir las puertas al público con protocolos sanitarios adecuados contra el Covid-19 en Chillán, ciudad que concentró la mayor cantidad casos de la región de Ñuble.
La propietaria de Magnolia Bar, Alexandra Junge, solicitó a las autoridades que se considere la opción de poder funcionar bajo un determinado esquema en fase 2, debido a las pérdidas significativas que han sufrido durante la emergencia sanitaria.
“En realidad cada vez es más crítico, si hace un par de meses decíamos que estábamos agonizando, ahora ya estamos “súper” agonizando, ya serán 9 meses. Hay que pensar que Chillán es una de las ciudades que más tiempo lleva en cuarentena. Somos de los locales que más tiempo permanecen cerrados, no hemos tenido ninguna oportunidad de abrir, cuando tuvimos la posibilidad en fase 3, pasamos automáticamente a la 1 y ahora seguimos en la 2 eternamente y ya necesitamos ayuda. Hemos pedido a las autoridades que estamos tratando de luchar, que así como se flexibilizó la fase 3 y se permite atender dentro de los locales con un aforo de un 25%, que se flexibilice la fase 2 y podamos abrir nuestras terrazas con un aforo aunque sea más pequeño. Aunque tengamos dos o tres mesas, son mesas que no tenemos ahora y que pueden servir para sobrevivir un poco más”, expresó.
Por su parte, Cristian Asfura, de Retrobar, aseguró que los locales están preparados para adoptar las exigencias sanitarias y proteger a sus clientes de eventuales contagios.
“Estamos todos en una situación crítica. Hace ocho meses que no tenemos abierto, entonces, te puedes imaginar la mochila que vamos a tener si es que llegamos abrir. Por eso, le pedimos a las autoridades que por favor nos dejen abrir, los protocolos que tenemos son sumamente intensos para que la gente vaya tranquilamente a comer y pasarlo bien, con todo los tipos de sanitización. Cada día se están muriendo más restaurantes y pubs, porque no aguanta más la cosa”, dijo.
Josué Sáez, de Costa Cuervo, manifestó que los empresarios del sector se sienten abandonados.
“Ha sido completo toda la pandemia, porque como local y ciudad llevamos ocho meses ya sin trabajar y poder generar empleo, tuve que dejar mis trabajadores, que eran 18 con contrato vigente. Estamos con los brazos cruzamos, no hemos tenido ninguna respuesta por las autoridad, nos sentimos solos”, declaró.
Finalmente, Rodrigo Palavencino, del local Onde’l Pala, señaló que la modalidad de comida con despacho a domicilio no permite mantener los negocios.
“Tuvimos que cerrar por la pandemia el 16 de marzo, un mes completo cerrado y luego pudimos retomar con el delivery el 15 de abril, entonces, hasta el día de hoy con delivery, pero es un modo paliativo de salvar el momento, no es algo que resuelva los problemas de fondo”.
Realidad epidemiológica
La Seremi de Salud Marta Bravo sostuvo que la capital regional concentró la mayor cantidad de casos en la región, por eso es que se han intensificado los testeos en terreno.
“Hemos visto que la gran cantidad de casos son de la comuna de Chillán, evidenciado por brotes intradomiciliarios. Por eso. que el llamado es constante a mantener las medidas de prevención, no bajemos los brazos. El coronavirus está presente, así como hemos visto también que han aumentado la cantidad de fallecidos, necesitamos la cooperación de todos nosotros para que podamos contrarrestar esta pandemia”,recalcó la doctora.
Texto: Jorge Hernán Quijada| S. Núñez