Una disminución en la ocurrencia de hechos delictivos al interior de las unidades de transporte público en lo que va del año, advirtió el presidente de la Asociación Gremial de Dueños de Taxibuses Urbanos de Chillán, Humberto Llanos.
Si bien en octubre del año pasado el dirigente mostró su preocupación por la creciente ola de delitos, lo que generó la instauración de una mesa de trabajo con la oficina de Coordinación Regional de Seguridad Pública, en los últimos meses el panorama es distinto, de acuerdo a lo manifestado por el representante del gremio de transporte local.
[bg_collapse view=”button-orange” color=”#4a4949″ expand_text=”Leer más” collapse_text=”Menos” inline_css=”width: 100%” ]
A juicio de Humberto Llanos, la masificación en la instalación de cámaras en las máquinas, gestión que se ha potenciado en los últimos meses, ha permitido reducir los hurtos y lanzazos, generando una mayor sensación de seguridad no solo en los pasajeros, sino también en los choferes.
El dirigente precisó que, según muestran los registros de los instrumentos de vigilancia, ocasionalmente se ven intentos de robo por parte de individuos quienes al notar la existencia de la tecnología, se sienten incómodos y se bajan o derechamente evitan cometer la fechoría.
“Las cámaras generan un efecto disuasivo porque los buses tienen un autoadhesivo que indica que la unidad tiene el sistema de vigilancia, entonces un delincuente habitual puede decidir no subirse a esa máquina. Esto ayuda también a que el pasajero viaje más tranquilo sabiendo que cualquier cosa que puede ocurrir, existe la posibilidad de que nosotros veamos las grabaciones y de ser el caso, entregar las imágenes para la presentación de una eventual denuncia ante Carabineros”, indicó.
Los choferes de las líneas 4 y 7, que son las de mayor demanda y por consecuencia en donde se estaban produciendo la mayor cantidad de delitos, confirman una disminución de los hechos en el presente año.
“Ha bajado bastante en comparación del año pasado, por lo menos yo no he tenido problemas. Ahora el ladrón lo piensa dos veces antes de hacer sus maldades cuando se da cuenta que hay cámaras”, sostuvo Raúl Lagos, conductor de la línea 4.
“Nosotros no hemos tenido problemas este año, hasta el momento todo va bien. Las cámaras ayudan mucho no solo para grabar los robos, sino también sirven como prueba ante cualquier accidente de tránsito; entonces favorece a los pasajeros y a nosotros los choferes, por eso nos sentimos más seguros”, afirmó Manuel Barboza, de la línea 7.
“A los ladrones como que les cuesta para que se suban a las micros cuando saben que hay cámaras”, opinó Ramón Quezada, chofer de la línea 7.
Actualmente todas las unidades de las líneas 4, 6 y 7 tienen los instrumentos de registro visual y en la línea 8 en gran parte de la flota. En las otras seis están funcionando aparatos en modo de prueba para que, en el corto plazo, se les instale los equipos definitivos.
De acuerdo a lo adelantado por Humberto Llanos, a inicios de febrero del 2023 todas las micros de la agremiación que lidera (en total 320) deberán contar con cámaras de seguridad.
Modernización
La puesta en marcha en febrero pasado del perímetro de exclusión de microbuses, obliga a los dueños de los vehículos a cumplir con una serie de requerimientos que apuntan a la modernización del transporte masivo de la comuna.
El presidente del gremio mayor de la locomoción chillaneja, explicó que al 31 de diciembre del presente año debería renovarse el 15% de la flota, equivalente a 50 máquinas, ya que se tiene previsto sacar de circulación aquellas fabricadas en los años 2000, 2001, 2002. Asimismo, en el corto plazo todos los choferes deberán llevar uniforme que los identifique como parte de la línea y de la agrupación gremial.
Una de las mayores novedades que se considera en el proceso de modernización de la locomoción colectiva mayor, es el fin del pago con monedas o billetes.
Entre febrero y septiembre del 2023 se habilitará el sistema de pago electrónico en las 10 líneas de la Asociación Gremial de Dueños de Taxibuses Urbanos de Chillán, dejando como única opción el uso de una tarjeta especial, similar a la bip de Santiago.
Sobre la instalación de GPS a toda la locomoción colectiva que representa, Humberto Llanos manifestó que esto ha significado un gran paso en el ordenamiento y mejoramiento del servicio, ya que esta tecnología permite verificar el respeto de los recorridos por parte de los conductores y además entrega información a los pasajeros sobre el tiempo que demoran en llegar las unidades.
[/bg_collapse]
