A toda marcha continúa el proceso de vacunación contra el Covid-19 en la región de Ñuble, donde a la fecha 56.120 personas ha sido inoculadas, mientras que a nivel nacional 1.394.363, al cierre de esta edición.
De acuerdo al detalle de cifras publicadas por Departamento de Estadísticas e Información de Salud del Ministerio de Salud, 48.584 personas han sido vacunadas en Ñuble con la primera dosis del Laboratorio Sinovac y 7.536 personas con la segunda de la vacuna Pfizer.
“Así que estamos muy contentos de este proceso, desarrollado de muy buena manera, en conjunto con los 21 alcaldes de la región que nos están ayudando”, destacó el Intendente Cristóbal Jardua.
Por su parte, la seremi de Salud, Marta Bravo, indicó que lo grupos convocados en el calendario de vacunación han respondido al llamado, considerando que es un proceso voluntario.
“Respecto a la adhesión ha sido bastante buena en la región, tanto así que nos encontramos en tercer lugar nacional con mejor cobertura, no se ha detectado ausentismo de ningún grupo objetivo. Los stock de vacunas que cuentan los equipos son para todos los grupos definidos por el ministerio de Salud”, explicó la seremi de Salud, Marta Bravo.
Si bien desde el Gobierno han calificado como exitoso el proceso, desde algunos gremios de la Salud existen reparos. Sin embargo, valoraron el gran esfuerzo que han hecho los funcionarios con los recursos que disponen para cumplir en los tiempos que corresponden.
Desde la visión del presidente de Federación de Profesionales Universitarios de la Salud (Fedeprus) Ñuble, Cristian Peña, en el abordaje de la campaña hay aspectos cuestionables que el gremio no ha pasado por alto, como fue en primera instancia la marginación de Ñuble entre las regiones priorizadas en recibir las primeras remesas en el país, en circunstancias que la evolución de la pandemia lo ameritaba.
“Primero que todo, la forma en que se priorizó a las regiones que recibían inicialmente las vacunas no estuvo exenta de dificultades, considerando que Ñuble fue unas de las regiones más golpeadas por la pandemia, entendiendo que tuvimos un brote en dependencias del SSÑ, y no consideraron a Ñuble que requería de forma urgente la vacunación. Luego eso se corrige e ingresamos, pero la primera decisión no fue la más adecuada”, dijo.
El dirigente valoró el trabajo del personal de salud que ha participado en la inoculación, ya que pese a que las condiciones no son las ideales, se han hecho esfuerzos para responder en forma adecuada a la contingencia y a los usuarios.
“Lo que ha sido exitoso es el trabajo que han realizado los mismos trabajadores de la salud con todo el bagaje y conocimiento que se tiene de los procesos de vacunación anuales que se realizan. El funcionario de salud ya estaba preparado para llevar de mejor forma un proceso de este tipo. Lamentablemente ya están entrenados hacer mucho con muy poco, no siempre estamos trabajando en las mejores condiciones, pero al fin y al cabo se logra de la mejor forma la tarea. Por ejemplo, elementos físicos o espacios ampliados para realizar el proceso de vacunación, el tener la disposición de asientos con distanciamiento para adultos mayores, no estaban en las condiciones básicas, porque los establecimientos tiene muchas falencias estructurales”, sostuvo.
Una de las preocupaciones permanente que ha alertado el gremio han sido la ausencia de campañas informativas, que han sido uno de los “vacíos” que ha presentado el combate del Covid-19 a lo largo de la pandemia, considerando que existen personas escépticas, que pululan cada día, a través de comentarios en redes sociales, a quienes es urgente convencer para lograr el control de la enfermedad.
“Una de las grandes responsabilidades es que logremos la vacunación de rebaño, que el 70 al 80% de la población acceda a la vacuna, entendiendo que es voluntaria. Entonces, si no tenemos campañas de vacunación donde resolvamos las dudas, lamentablemente se va a traducir en baja adherencia. Los adultos mayores son los que mejor responden a los procesos de vacunación, porque, además, han vivido la pandemia con el temor que son los más susceptibles a enfermarse grave. Pero ¿Qué va a pasar cuando estemos llamando a la gente de 40 años, que ya tienen la duda con respecto a la efectividad de la vacuna?”, explicó.
La presidenta de la Asociación de Funcionarios de Salud de Atención Primaria (Afusam) Chillán, Mónica Salazar, recalcó que los trabajadores han realizado una intensa labor, considerando que la dotación actual no es la suficiente para un proceso de esta magnitud, y aún así han estado a la altura de las circunstancias.
“Ha sido un proceso que conlleva mucha responsabilidad, se ha entregado toda la disposición de los funcionarios, porque de verdad es harto. Hay mucha gente que se va a vacunar a domicilios, personas postradas y adultos mayores. La gente de salud está haciendo todos los esfuerzos para poder cumplir con la vacunación de los usuarios. Se han hecho muchos esfuerzos, porque no estamos con la cantidad de funcionarios que en realidad se necesitan, para todo este proceso falta gente”, sostuvo.
“A lo mejor si se toma más gente se podría terminar más rápido, porque después no nos olvidemos que viene la campaña de la influenza”, agregó.
La representante aseguró que los grupos convocados a la vacunación han sido responsables en atender el llamado a participar, igual comportamiento han tenido los funcionarios quienes han optimizado los procedimientos.
“Se está respetando el calendario, por lo menos en los consultorios. El tema es que tenemos que ver situaciones especiales y ahí se aplica criterio”, indicó.
“Sí, está toda la voluntad, se ha hecho lo de vacunar a gente que es mayor de edad. Incluso cuando se van a vacunar a domicilio, se consideran también a los cuidadores, que puede ser gente joven, que también se está vacunando, porque es un funcionario que está realizando un servicio. No se saca nada con vacunar al adulto mayor, si el cuidador va llegar contagiado y pueden contagiar a otros pacientes de la casa. Tenemos que tomar todos los resguardos y proteger a los habitantes”, aclaró.