Este sábado la ministra del Interior, Carolina Tohá, anunció la declaración del Estado de Catástrofe para varias zonas del país, desde la región de Valparaíso hasta el Bío Bío.
Esta medida se tomó en respuesta al intenso sistema frontal que ha causado graves estragos, desbordamiento de ríos y el aislamiento de cientos de viviendas en las zonas centro-sur de Chile.
La declaración del Estado de Catástrofe implica una serie de medidas extraordinarias para hacer frente a la emergencia y garantizar una respuesta eficiente y coordinada por parte de las autoridades.
Según la ministra Tohá, esta medida permite recurrir a recursos adicionales una vez que los recursos de emergencia previstos se hayan agotado. De esta manera, se asegura que los esfuerzos de recuperación y ayuda puedan continuar sin restricciones financieras.
“Eso permite que una vez que los recursos de emergencia que están previstos se hayan gastado, se pueda recurrir a recursos adicionales”, aclaró Tohá.
Pero la medida va más allá. “Y especialmente ayuda a que todos los actores que tienen que colaborar en esta emergencia no tengan ninguna duda de que pueden movilizar los recursos”, agregó.
Además, la declaración del Estado de Catástrofe brinda claridad y facilita la movilización de recursos por parte de todos los actores involucrados en la emergencia. Esto incluye a las fuerzas armadas, organismos de emergencia, servicios públicos y otras instituciones que desempeñan un papel fundamental en la atención y asistencia a las comunidades afectadas.
Las intensas lluvias han provocado graves daños en infraestructuras clave, como carreteras y puentes, así como el desbordamiento de ríos, lo que ha generado evacuaciones y dejado a cientos de viviendas aisladas. Las autoridades han intensificado los esfuerzos de rescate y asistencia, priorizando la seguridad de la población y brindando apoyo a los damnificados.
