Señor Director:
Hoy, como cada día, leía el diario de Ñuble, que usted bien dirige y me encontré con la generosidad de una joven chillaneja que en vida había manifestado su intención de ser donante, decisión que su familia, manteniendo la altura de miras de su hija, corroboraron.
Mucho se habla y también se “ningunea” a la juventud de hoy, pero muestras para el botón hay muchas, y esta jovencita que partió tan inesperadamente a recorrer otro mundo, es uno más de esos botones.
Deseo agradecer como una ciudadana común de esta comuna, a sus padres que en medio del dolor ante la partida de su niña, tuvieron la generosidad de mitigar un poco esa pena en pos de otras personas.
Su deseo de ayudar y ser un aporte para mejorar la calidad de vida a otras muchas personas y su entorno familiar nos debe hacer reflexionar, porque estamos acá de paso y ojalá que el nuestro deje huella, como sin duda lo hizo esta generosa muchacha.
Mª Eugenia Uribe Casanueva