Señor director:
Tal como en una casa, los gastos que realiza el Estado tienen que estar financiados de alguna forma, para ellos cuenta con varias alternativas: contrayendo deuda, ahorrando, reduciendo gastos que son innecesarios o aumentando los ingresos de alguna forma.
Cuando somos nosotros quienes queremos aumentar nuestros ingresos de manera legal buscamos algún “pololito”. En cambio, el Estado lo hace por medio de aumento o creación de impuestos a quienes tenemos domicilio en su territorio. En este punto se debe ser cauteloso, pues actualmente en un mundo globalizado los capitales y recursos los particulares pueden trasladarlos a otros países más favorables en esta materia, perjudicando la inversión y trabajo en Chile.
Por lo anterior, además de ser inconstitucional y entrampar la discusión del PGU, resulta compleja la modificación que establece un tributo de tasa 1,5% a patrimonios que excedan de US$ 5 millones y de 2,5% a los que excedan US$ 22 millones, más sin un estudio previo de los efectos del mismo impuesto.
Cristóbal Cifuentes Torres
Académico de Derecho Financiero USS