Semanas de definiciones es la que vive la dirigencia de Ñublense de cara al 2022, temporada que para los diablos rojos estará marcada por su reestreno en la Copa Sudamericana, fijado para el 8 de marzo, después de 13 años sin presencia en la arena internacional.
Es por eso que uno de los primeros pasos es asegurar la continuidad del entrenador Jaime García y el de algunas piezas vitales que terminaron contrato, como el lateral izquierdo Jovany “Chucky” Campusano.
García, solo a detalles
En el primer caso, el adiestrador nativo de Cartagena, estaría a “detalles” de renovar su vínculo con el cuadro de Chillán, ya que se encuentra en conversaciones con el presidente del club Patrick Kiblisky.
“Estamos conversando con Patrick, con quien, y lo destaco, tengo una excelente relación, porque siempre hemos conversado diciéndonos las cosas cara a cara con respeto y sin rodeos. Hay algunos detalles que se tienen ver”, aclaró García, quien descartó que esté prácticamente “listo” en Audax Italiano, club que lo pretende para reemplazar al saliente Pablo “Vitamina” Sánchez.
¿Sigue el ‘Chucky’?
Uno que también reconoció acercamientos con la dirigencia de Ñublense, para extender su vínculo, tras finalizar contrato después del triunfo frente a Palestino, es el lateral Jovany Campusano.
“Firmé el finiquito, pero sí hay acercamientos del club para llegar a un acuerdo y yo también tengo interés. Las negociaciones son estresantes, pero es parte de la carrera del fútbol y yo tengo que velar por el bienestar de mi familia.
“Sinceramente, sí, pero nada concreto aún, pero si existe el interés de un par de clubes”, reconoce Campusano, quien revela lo clave que ha sido Jaime García en su carrera.
“Sí, fue fundamental, no solo para mí, sino que para el club pues los logros que consiguió lo avalan. Llegó el 2019, levanta el club, lo mete en liguilla y después lo saca campeón y ahora a la Copa Sudamericana”, destaca el lateral izquierdo, quien de quedarse, se ilusiona con un objetivo sudamericano.
“Sí, porque no, si peleamos palmo a palmo contra los equipos que clasificaron a la Copa Sudamericana. No hubo mayores diferencias en cancha, demostramos que estamos preparados. Sí, me llego a quedar, el objetivo está claro, si está la posibilidad de avanzar a la fase de grupos hay que agarrarlo”, precisa Campusano, quien reconoce que creció en el aspecto táctico jugando en Primera División, categoría en la que había jugado solo 13 partidos por La Serena.
“En lo íntimo sabía que me podía ir bien, porque me preparo al cien por ciento. Fue un año positivo, quizá nos estancamos, pero no tocamos fondo. Es difícil mantener el nivel de principio a fin. Si hubiésemos tenido una buena racha en esos duelos que no ganamos, especialmente jugando de loca, quizás llegamos más arriba. Con nuestra gente de local debe ser más difícil para el rival jugarlos”, detalla, antes de revelar su íntimo deseo en plena negociaciones.
“Es un gran interés, estamos contentos en Chillán. La gente nos ha recibido bien, también esta la Copa Sudamericana, ojalá salgan bien las cosas por mi bienestar de mi familia ya que me acompaña donde uno vaya y si no llegamos a acuerdo, agradecer a la gente por su cariño, que día a día me lo hacen sentir y tendrán a un chillanejo más apoyándolos desde donde sea”, sentenció el “Chucky”, quien junto a Jaime García, podrían ser parte de la base del Ñublense 2022, que ya ilusiona a la hinchada roja.
