El pasado lunes, el gobierno de Gabriel Boric cumplió un mes en funciones. Como toda administración entrante, ha necesitado de un período de ajuste para poder asentarse en el poder, y a la vez, efectuar las evaluaciones y diagnósticos correspondientes.
En el caso de Apruebo Dignidad, el desafío era aún más grande: nunca habían gobernado, por lo tanto, todo sería más complejo desde el punto de vista de la instalación.
A nivel regional, el actual gobierno tuvo, en general, las mismas dificultades, con mayor o menor intensidad en algunos territorios.
En el caso de Ñuble, si bien el inicio fue lento, y el nombre de todas las autoridades principales no se conoció sino hasta el pasado viernes, con la nominación de la última secretaria regional ministerial que faltaba, Ximena Salinas, de Salud; la cohesión al interior de los partidos que componen Apruebo Dignidad, Socialismo Democrático y el PPD, ha permitido que ningún nombramiento haya sido cuestionado posterior a su confirmación.
Es más, en gran parte de las designaciones se mantuvo el acuerdo regional alcanzado entre las directivas locales de los partidos, lo que fue destacado por el delegado Presidencial, Claudio Ferrada.
“Hemos quedado tremendamente satisfechos, pues se hizo un trabajo de joyería buscando los mejores perfiles, los mejores currículos, los mejores líderes políticos que necesita la región”, afirmó, destacando que se respetó el acuerdo regional, y no surgieron problemas entre las colectividades, como ocurrió en otras regiones.
En tanto, la vocera regional, Valentina Pradenas, reconoció que el proceso de instalación no ha estado exento de problemas.
“No ha sido fácil. Desde ese punto de vista hacemos una autocrítica, pero sobre todo, nos predispone a hacer un trabajo más efectivo y cohesionado”, dijo.
Destacó la necesidad de hacer cambios en las estrategias de trabajo para acercar el Gobierno a la ciudadanía y fortalecer la relación con las personas, “porque ahí están los problemas de los cuales debemos hacernos cargo, y también parte de las soluciones, por eso queremos comunidades activas”, afirmó.
Pradenas añadió que están conscientes que las expectativas son altas, “y así es también, el compromiso de este gabinete, el que ya se encuentra en un 100% operativo”, sostuvo.
Las claves del Gabinete
Paridad de género, equilibrio político y convergencia entre la experiencia y la juventud parece ser la fórmula aplicada en Ñuble.
Si bien en paridad no se alcanzó el 50% de cupos para mujeres, sí se llegó al 41% con la designación de siete secretarias regionales ministeriales en las carteras de Segegob, Mujer, Desarrollo Social, Cultura, Salud, Trabajo y Justicia.
“El Gobierno ha estado trabajando en la paridad de los nombramientos, la que se espera, tenga mayor presencia en las direcciones regionales. Somos un gobierno feminista, y eso está directamente asociado con potenciar el rol de la mujer en Chile, y en especial en Ñuble, donde la brecha es muy notoria”, manifestó Valentina Pradenas.
En cuanto a los equilibrios políticos, el Gabinete de Ñuble es quizás uno de los más ‘balanceados’ del país. Revolución Democrática es el partido que se quedó con más designaciones, partiendo con la Delegación Presidencial Regional. Obtuvo tres carteras (Medio Ambiente, Trabajo y Mujer), seguido de Convergencia Social (Segegob y Economía); Partido Comunista (Vivienda y Desarrollo Social), Partido Socialista (Agricultura y Justicia); Partido Radical (Educación y Bienes Nacionales); PPD (Obras Públicas y Cultura); Fuerza Común (Transporte); Partido Liberal (Energía); UNIR (Deporte) y Frente Regionalista Verde Social (Salud).
Las Delegaciones Provinciales, en tanto, fueron para el Partido Comunista (Punilla) y el Partido Liberal (Itata).
Respecto de la experiencia de quienes conforman este Gabinete Regional, hay un grupo importante de profesionales jóvenes que debuta en cargos de primera línea, pero que a diferencia de gabinetes anteriores, sí cuenta con bagaje político dentro de sus colectividades, el cual desplegaron principalmente para la última presidencial, en favor de Gabriel Boric, y también para el plebiscito de 2020 y la elección de constituyentes. Muchos de ellos, incluso, compitieron en esta última instancia, o para las municipales y parlamentarias.
Otro grupo pertenece a las filas de la ex Concertación, y cuenta con experiencia en el aparato público tanto en los gobiernos de Michelle Bachelet, como con anterioridad, como es el caso de César Rodríguez o Paulo De La Fuente.
Articulación con el Gobierno Regional
A diferencia del anterior gobierno de Sebastián Piñera, el actual Gabinete Regional llevará a cabo un trabajo colaborativo con el Gobierno Regional.
Es más, el pasado fin de semana se llevó a cabo el Primer Gabinete Ampliado, liderado por el gobernador, Óscar Crisóstomo, quien fue claro.
“Ya no es tiempo de colocarnos al día, debemos dar un salto para ir al día. Debemos retener nuestros talentos, ofrecer mayores posibilidades de desarrollo a todos los habitantes de nuestra Región de Ñuble, ir acortando las brechas de desigualdad, de calidad de vida, y no debemos quedarnos en los mínimos, debemos soñar y trabajar, como por ejemplo, debemos prepararnos para tener una economía de futuro que es ahora, donde tengamos una agricultura y un turismo inteligente”, sostuvo el gobernador regional.
En ese sentido, la vocera regional, Valentina Pradenas, hizo un llamado a los distintos actores sociales e instituciones a hacer un trabajo colaborativo y proactivo.
“Hemos avanzado mucho en una estrategia de trabajo coordinado con el Gobierno Regional, y eso lo queremos replicar con los veintiún municipios, para que se dé una real descentralización”, aseveró.
Direcciones regionales
Es común que cada cuatro años, los gobiernos entrantes quieran disponer de la máxima cantidad de cargos directivos del aparato del Estado, con el objeto de desplegar de mejor forma sus políticas públicas.
Si bien todos los conglomerados acatan tácitamente esta situación, siempre han surgido críticas por el denominado “descabezamiento” que se hace de diversas reparticiones, tanto a nivel nacional como regional. De ahí que surgiera el sistema de Alta Dirección Pública (ADP), administrado por el Servicio Civil, el que buscaba elegir de entre los mejores, a los altos directivos públicos.
Sin embargo, los criterios de elección, al parecer, siguen siendo políticos, y cada autoridad que asume, prefiere desembolsar grandes sumas en indemnizaciones, para contar con personal de su entera confianza.
A nivel local, ya se han solicitado algunas renuncias, como es el caso del director del Servicio de Salud Ñuble, uno de los dos cargos de mayor jerarquía de la ADP local.
En total en la región, son 29 los directivos que actualmente se encuentran en funciones y que fueron elegidos bajo este sistema: Registro Civil, Serviu, SEA, Servel, Superintendencia Educación, Senadis, Injuv, Senda, SAG, Indap, Sernameg, Sernatur, Sernac, INE, TGR, IND, Sence, IPS, Dirección del Trabajo, SEC, SML, Junaeb, Junji, Servicio de la Protección de la Niñez, Servicio Nacional del Patrimonio, Subdirección Administrativa Hospital de Chillán, Jefe Departamento Auditoría SSÑ, Director Atención Primaria SSÑ, y director del Hospital de Chillán.
A ocho de ellos se les renovó el cargo recientemente: a seis entre febrero y marzo de este año (Superintendencia de Educación, Indap, SEC, Junji, Registro Civil y Serviu); y a dos durante 2021 (Sence e IPS).
Actualmente, dos cargos se encuentran en proceso de evaluación en el Servicio Civil: director del Servicio Local de Educación Pública Punilla Cordillera y director regional del Sename.
El resto de las direcciones o jefaturas regionales, que ascienden a 37, han sido nombradas directamente por el gobierno anterior, y según precisaron desde la Delegación Presidencial Regional, ninguna de sus autoridades ha presentado su renuncia. Es más, algunos se tomaron vacaciones.