Angustiados se encuentran los integrantes de la Fundación Eleva quienes durante el fin de semana sufrieron el robo de sus equipos, dejando a los jóvenes sin lo necesario para capacitarse.
La organización sin fines del lucro promueve inserción y la integración social de personas con síndrome de Down y con otras discapacidades, mediante capacitaciones para la vida social y laboral.
Hace nueve años fue creada la entidad, ubicada en avenida España de Chillán, donde atiende a 20 jóvenes, con un promedio de 30 años de edad.
En su trayectoria, la fundación es tercera vez que sufre un robo y daños en su equipamiento. Esta vez fueron sustraídos dos notebook, un data proyector, parlantes, herramientas de banquetería, cilindro de gas, además de las colaciones para el mes.
“Nos rompieron todas las puertas, la otra vez nos entraron a robar y nos sacaron la protección y nadie vio nada. Nosotros que no recibimos subvención por ello, todos nos cuesta. Nos cuesta postular a proyectos, pedir plata a los papás. No es un robo millonario, pero no saben cuánto nos hacen falta esas cosas. Nos robaron toda la colación del mes y eso nos cuesta adquirirlo, porque la mayoría son madres de escasos recursos. Ellos ni siquiera tienen un rebaja en las micros, pagan su pasaje igual que todos y a ellos los estamos capacitando para la vida laboral”, sostuvo la directora de la fundación, Estrella Pinto.
La encargada lamentó que sean blanco de la delincuencia considerando que la organización trabaja ayudando a jóvenes provenientes de familias de escasos recursos.
“El año pasado en agosto también nos robaron, los notebooks y las estufas que habíamos comprado con tanto sacrificio. Es mucho y quiero darlo a conocer para que sepan que nos hacen mucho daño con esto. (…) Es la tercera vez que entran a robar y esta vez nos robaron dos notebook, un data que es tan importante para la capacitación de los jóvenes. Nos robaron un galón de gas, servicios que los ocupaban en banquetería. Además dos parlantes recién comprados gracias a un proyecto del Gobierno regional para la danza afro, ni siquiera lo habíamos sacado de las cajas”, detalló.
Tras lo sucedido, Estrella comentó que la PDI llegó hasta el lugar para efectuar diligencias encaminadas a dar con los responsables.
“Ayer vino la PDI tomó huellas, porque las zapatillas estaban marcadas en las puertas. No tenemos cámaras, porque no hay dinero para eso. Las mamás pagan una cuota 10 mil pesos y con eso pagamos la luz, el agua, hacemos almuerzos para los jóvenes, porque a veces tienen que estar todo el día cuando desarrollando proyectos”, dijo.
Respecto a labor que ejerce la fundación “Ahora estamos con un proyecto de capacitación en coctelería. Nos ganamos un proyecto con Senadis y estamos trabajando con 19 jóvenes para que puedan trabajar en eso y tengan su sueldo, porque la mayoría son jóvenes de 30 años. También han aprendido pastelería. Además, tenemos un grupo de danza afro, que hemos salido a la calle y ahora tenemos una nueva presentación el 31 de marzo”.
Estrella criticó que la pérdida del equipamiento suceda en circunstancias que hoy se celebra el Día Internacional del Síndrome de Down.”Es triste y duro que nos hagan esto, porque nos cuesta mucho estar pidiendo diariamente a las mamás, porque a ellos hay que tenerles una colación”, manifestó.