Dada la Alerta Sanitaria por COVID-19 y la recomendación de realizar el mayor aislamiento posible entre las personas, a fines de marzo Fonasa introdujo un cambio importante en su normativa que ha permitido la atención remota para 39 prestaciones médicas, con el objeto de facilitar la atención de salud en forma remota o virtual.
Pero debido al interés de los Colegios de Profesionales por adherirse a esta modalidad de atención, Fonasa agrega siete tipos de atenciones adicionales: Traumatología, Kinesiología y Neurología Pediátrica. Al igual que con las anteriores, estas consultas se podrán realizar de manera remota, o a través de alguna plataforma o medio digital, sin que sea necesario realizar la atención de manera presencial.
“La mejor manera de combatir esta pandemia y ayudar a que se cumplan los objetivos sanitarios, es tener el menor contacto social posible. Como institución queremos facilitar el acceso de los usuarios a los servicios que entrega Fonasa, articulando todos los esfuerzos para que eso ocurra. Las personas evitarán los traslados, restringir sus salidas o quedarse en casa sin que por esto deban interrumpir la continuidad de los tratamientos médicos y menos postergar nuevas consultas si eso es lo que necesitaran”, comenta el Director Nacional de Fonasa, Marcelo Mosso.
Por su parte, Camilo Erazo, CEO del Centro Nacional en Sistemas de Información en Salud -(CENS), manifestó que “antes de realizar una consulta a distancia, los profesionales deberán asegurarse de que los pacientes entiendan cómo se desarrollará la consulta y preocuparse de que reciban a información en un lenguaje sencillo, que le permita entender el proceso y acotar las expectativas sobre el tipo de atención que recibirá. Como esta relación médico paciente es diferente a lo que se hacía anteriormente, será importante que los equipos de salud puedan ofrecer el apoyo y contención emocional que están necesitando las personas”.