Las protestas ciudadanas puiseron nuevamente en la agenda el proble-ma de los precios de los medicamentos en Chile, un asunto de larga data donde los intentos del Es-tado por regular el mercado no han conseguido mucho, con iniciativas que apuntan a aumentar la competencia, fracaso que en opinión de algunos políticos, entre ellos el propio ministro de Salud, Jaime Mañalich, responde a un lobby feroz por parte de la industria, tanto los laboratorios como las grandes cadenas de farmacias.
Sin embargo, desde el Colegio de Químicos Farmacéuticos y Bioquímicos vienen advirtiendo hace años que el problema de los altos precios no se soluciona solo con mayor competencia, sino que con una regulación de los precios, una idea que hasta hace un par de semanas era calificada como “nefasta” por Mañalich.Luis Felipe Ruiz, presidente del capítulo regional Ñuble del colegio profesional, explicó que “es necesario comprender que los medicamentos no s on bienes de consumo, son bienes sociales, y así que dó est able cido en la Ley de Fármacos, pero en la práctica siguen siendo bienes de consumo, lo que significa que se rigen por las leyes del mercado”, a lo que se debe agregar que se trata de un mercado altamente distorsionado, según ha planteado la propia Fiscalía Nacional Económica (FNE), que ha denunciado prácticas abusivas, como la colusión.
Colusión
Un estudio sobre el precio de los medicamentos elaborado por CER Regional, reveló que entre enero de 2014 y octubre de 2018 los medicamentos registraron un alza promedio de 32%, el doble de la inflación (IPC).
“El precio de los medicamentos es una de las variables de mayor incidencia en el presupuesto de los hogares del país. La VIII encuesta de presupuestos familiares del INE cifra en 7,6% la partici-pación del gasto en salud en el presupuesto familiar de los hogares de las capitales regionales (incluido Chillán y Chillán Viejo), respecto del cual el 40% corresponde a gastos en medicamentos. Los economistas se refieren a los medicamentos como un bien de primera necesidad sin sustitutos (inelásticos), es decir, independiente de la variación en el precio de los mismos, la población debe consumirlos igual”, sostuvo Renato Segura, director del CER Regional.
El investigador expuso que “cuando se está frente a un bien de estas características, el comportamiento monopólico de la industria genera enormes transferencias de excedentes desde los hogares a las empresas, transferencias que no discriminan entre pobres o ricos”. El comportamiento monopólico de los actores de la industria en Chile quedó documentado en el caso de colusión de precios en farmacias descubierto en mayo de 2008.
Pero, producto de la dificultad del regulador para encontrar evidencias punibles de colusión en la industria, nadie puede asegurar hoy en día que dicha práctica haya sido desterrada del mercado.
El estudio elaborado por Segura analizó el comporta-miento mensual del Índice de pre cios de los medicamentos para el período comprendido entre enero de 2014 y octubre de 2018, el cual reveló, ademas, dos curiosidades: “por un lado, su correlación positiva casi perfecta con su símil de Estados Unidos, independiente del comp or tamiento del tipo de cambio, y por otro lado, la persistencia de la variación de 2% de aumento mensual, la cual se mantiene casi inmutable durante el período de análisis”.
El académico detalló que la variación del índice de precios por producto sitúa a los remedios para el aparato digestivo, oftalmológicos, dermatológicos, cardiovas-cular y antivirales por encima del promedio (32%).
Y sembró la duda: “estos tienen una alta coinciden-cia con las 7 causas más frecuentes de pacientes que egresaron del sistema hospitalario en el año 2017, reportadas por el Ministerio de Salud; es decir, son bi e ne s muy inelásticos , sobre los cuales el poder de mercado de la oferta genera los mejores dividendos. Los remedios oftalmológicos y dermatológicos son muy demandados por las condiciones del medio ambiente y uso de la tecnología actual, muchos de los cuales presentan baja cobertura en los planes de salud, afectando directamente el presupuesto de los hogares”
Gasto en salud
A partir de la VIII Encuesta de Presupuestos Familiares, que elabora el INE, el gasto en la división salud muestra un comportamiento creciente en los quintiles de mayores ingresos de la población, alcanzando su máximo valor para el quintil 4, con un 8,6%. En el caso de Ñuble , de acuerdo a datos de la Encuesta Casen 2017, el promedio de ingresos de las familias del quintil 4 es $747.176, por lo que el gasto en salud bordea los $64 mil.“Lo que ocurre es que aquellos hogares que poseen un menor ingreso, tienen mayor acceso a los subsi-dios que provee el Estado”, aclaró Segura.
Y añadió: “se observa que, a pesar del moderado nivel de ingresos promedio que registra el quintil 4, presenta la mayor exposición frente a los efectos negativos que genera la colusión de las empresas en la industria de la salud”.
Es así como el investigador concluyó que “el precio de los medicamentos en Chile es un problema pendiente que afecta mayoritariamente a los sectores de menos recursos y más vulnerables”. Según el estudio sobre “Regulación y fijación de precios de los medicamentos en Canadá, España, Australia, Reino Unido, Brasil y Chile”, publicado por la Biblioteca del Congreso Nacional, “en Chile no existen mecanismos de regulación como sí ocurre en la mayoría de los países de la OCDE. Es decir, el país ha optado por confiar al mercado la asignación eficiente de los recursos”, sentenció el director del CER Regional.
Regulación de precios
Para Luis Felipe Ruiz, el problema no solo está en el comportamiento de las cadenas de farmacias, sino que también por parte de los laboratorios. En ese sentido, recordó que el Colegio hizo una propuesta al Gobierno que apuntaba a regular los precios, “seguir los ejemplos de países de Europa, que tienen una política nacional de medicamentos, en la cual establecen un límite, una banda de precios, que sería, a nuestro parecer, la única forma de poder regular los precios, ya que actualmente no tenemos claro el valor de un medicamento desde la elaboración hasta cuando sale al mercado, por lo tanto, finalmente son los mismos laboratorios los que establecen los precios de acuerdo a lo que ellos creen que la comunidad puede pagar por ellos”.
En ese sentido, advirtió que los laboratorios venden a precios distintos depen-diendo de la farmacia y del mercado.De igual forma, Valeska Jorquera, vicepresidente del Colegio, comentó que “el modelo de bandas de precios es el que se usa en otros países, como Argen-tina, que tienen precios más bajos, donde fijan un límite de 20% a la ganancia, entonces se frena un poco el exceso de rentabilidad en las grandes cadenas, y ése es el gran problema, porque hoy ellos pueden marginar un mil por ciento. En el fondo, las cadenas fijan los precios y nadie los puede frenar”
Frente a la alternativa de abastecer a las farmacias a través de la estatal Cenabast, como se está haciendo con las llamadas “farmacias populares”, por ejemplo, Ruiz afirmó que “por el momento, ese camino está lleno de piedras, porque Cenabast ya tiene muchas dificultades para abastecer el mercado público, por lo tanto, si bien es una buena idea, hay mucho que mejorar en Cenabast, si el Gobierno decide invertir y mejora el presupuesto, la infraestructura y la cadena logística y de distribución, sí va a ser una buena alternativa para abastecer a las farmacias independientes”.
Al respecto, la vicepresidenta acoto que la experiencia de las farmacias populares “vino a demostrar que los precios pueden ser más bajos en Chile, y que existen alternativas, que las farmacias municipales son una vía, pero también a través de Cenabast, aunque yo tengo mis aprensiones, porque Cenabast no tiene un buen cumplimiento”.
Luis Felipe Ruiz sostuvo que se requieren cambios profundos a la legislación para abordar el problema de los altos precios. Respecto a las recientes afirmaciones del ministro de Salud sobre la posibilidad de fijar los precios, hechas bajo la presión de las masivas protestas Mañalich anunció que el Gobierno tienen la intención de proponer un proyecto de ley que ponga un tope de precio en los medicamentos de marca que tengan patente vigente-, el timonel de los farmacéuticos de Ñuble reconoció que se sorprendió.
“A nosotros nos sorprendió como colegio profesional, ya que llevamos años planteando esto, y este mismo ministro dijo hace un mes que esa medida iba a ser nefasta; pero después aclaró que se evaluará si es que las medidas que están impulsando no fun-cionan”.
En esa línea, Ruiz manifestó que las medidas que se están implementando en el marco de la nueva política de medicamentos, como el descuento a afiliados de Fonasa o la exigencia de bioequivalentes “no son soluciones de fondo, son soluciones cosméticas, aun-que también reconocemos que es una mejoría leve y transitoria, que mejora el acceso, pero no reduce los precios, por ejemplo, en el caso de los innovadores”.
Asimismo, Jorquera añadió que el Estado debe generar herramientas de fomento para las pymes del rubro, promoviendo la instalacion en zonas donde no hay oferta y mejorando el acceso.