El pasado sábado Venezuela informó que detuvo a seis extranjeros, incluido un infante de Marina de Estados Unidos, por un supuesto complot para “desestabilizar” el país que ha estado en crisis desde las elecciones disputadas en julio recién pasado.
El ministro del Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, afirmó que el supuesto complot fue dirigido por la CIA y tenía como objetivo matar al líder del país, Nicolás Maduro. El Departamento de Estado de EE.UU. rechazó la afirmación como “categóricamente falsa”.
La acusación se produce mientras la oposición de Venezuela, múltiples líderes latinoamericanos y Estados Unidos se niegan a reconocer la victoria electoral disputada de Maduro, que ha sido seguida por protestas mortales durante las cuales miles fueron arrestados.
En una conferencia de prensa este sábado, Cabello identificó al supuesto infante de Marina como William Joseph Castañeda Gómez y afirmó que era el líder de la operación. También nombró a otros dos estadounidenses detenidos: David Estrella y Aaron Barrett Logan.
Y dijo que, además de los estadounidenses, fueron arrestados dos ciudadanos españoles —José María Basoa Valdovinos y Andrés Martínez Adasme— y un ciudadano checo, Jan Darmovzal. Las autoridades venezolanas también incautaron 400 fusiles estadounidenses vinculados al supuesto complot, según indicó.
“La CIA está a la vanguardia de esta operación”, aseguró en la conferencia de prensa, afirmando que el Centro Nacional de Inteligencia de España también estaba involucrado. “Eso no nos sorprende en absoluto”.
Además, afirmó que la operación tenía “objetivos muy claros de asesinar al presidente Nicolás Maduro” y a otros políticos venezolanos de alto rango, incluido él mismo y el vicepresidente.
El Departamento de Estado de Estados Unidos negó las afirmaciones. Un portavoz confirmó este sábado que un miembro del Ejército de EE.UU. fue arrestado en Venezuela y que el departamento estaba “al tanto de informes no confirmados de dos ciudadanos estadounidenses adicionales detenidos” en el país.
“Cualquier afirmación de la participación de EE.UU. en un complot para derrocar a Maduro es categóricamente falsa”, agregó, señalando que “Estados Unidos continúa apoyando una solución democrática a la crisis política en Venezuela”.
El Departamento de Estado está buscando información adicional, aseveró el portavoz.
Una fuente del Ministerio de Asuntos Exteriores de España comentó a Reuters que estaba pidiendo a Venezuela más información.
“La embajada española ha enviado una nota verbal al Gobierno de Venezuela pidiendo acceso a los ciudadanos detenidos para verificar sus identidades y su nacionalidad y para saber de qué se les acusa exactamente”, dijo la fuente a Reuters, hablando bajo condición de anonimato.
Por otro lado, fuentes del Ministerio de Exteriores de España afirmaron a CNN que “España desmiente y rechaza rotundamente cualquier insinuación de estar implicada en una operación de desestabilización política en Venezuela. El Gobierno ha constatado que los detenidos no forman parte del CNI ni de ningún otro organismo estatal. España defiende una solución democrática y pacífica a la situación en Venezuela”.