Hace una semana el Presidente Sebastián Piñera anunció el llamado Plan “Paso a Paso Chile se recupera”, que considera, además de medidas para apoyar a las pymes y simplificar trámites, una inyección adicional de recursos estatales para acelerar un paquete de proyectos de inversión en 2021-2022 en las carteras de Obras Públicas, Vivienda, Transporte, Salud, Agricultura y Deportes, entre otras. En el caso de Ñuble, según el propio Mandatario lo reafirmó el pasado 20 de agosto en Chillán, se trata de US$300 millones adicionales, que permitirían generar solo por concepto de iniciativas MOP cerca de 1.100 empleos anuales.
No obstante, el anuncio ha sido recibido con escepticismo entre expertos y parlamentarios de oposición de la zona, pues se considera que las inversiones anunciadas no son nuevas y que el impacto en la desocupación no será sustantivo. Ello, considerando que en los últimos 12 meses se han perdido más de 47 mil puestos de trabajo en Ñuble, en buena medida como consecuencia de la crisis sanitaria por Covid-19; y que algunos de los proyectos anunciados están en etapa de diseño.
Ministerio de Obras Públicas
En el caso del MOP, el seremi Cristóbal Jardua explicó que el plan viene a potenciar “los proyectos que ya estamos trabajando junto al intendente Martín Arrau, por ejemplo, el Plan 100X10 (pavimentación de caminos secundarios) que además de mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos, permite generar mano de obra local. En este sentido, se refuerzan iniciativas en conectividad, riego e infraestructura, priorizando la tercera etapa del colector de aguas lluvias de Chillán; el estudio de factibilidad del embalse Chillán y la construcción del alimentador 2 para las áreas blancas del Laja Diguillín”.
Añadió que “también se incluye el mejoramiento de la Ruta del Secano Interior, que une las ciudades de Ninhue y Portezuelo, la reposición de la ruta Los Conquistadores, que conecta las ciudades de Coelemu y Quirihue, pasando por Trehuaco; la reposición de la Capilla San Juan de Dios, que se encuentra a un costado del nuevo Hospital Regional; la segunda etapa del borde costero de Buchupureo; la construcción de sistemas de APR, entre otros proyectos”.
El seremi detalló que “el Plan, para Ñuble, implica una inversión adicional entre 2021 y 2022 de aproximadamente 66.000 millones de pesos. Todo esto se sumará al presupuesto sectorial destinado para la región”.
De esta forma, según explicó, “la inversión proyectada para Ñuble entre 2020 y 2022 es del orden de 235.000 millones de pesos, monto que incluye el presupuesto del Ministerio más lo asociado a este Plan. Adicional a esto, se invertirán 22.000 millones de pesos correspondientes a obras concesionadas en la Ruta 5, en los tramos Talca – Chillán y Chillán – Collipulli, lo que se traduce en más de 600 puestos de trabajo anuales”.
Consultado por la generación de empleos, Jardua señaló que “este plan permitiría generar anualmente 1.100 empleos directos en la región, lo que se suma a la fuerza laboral que MOP Ñuble ya aporta mediante las iniciativas en ejecución”, con lo que la cartera aportaría en total con 3 mil puestos de trabajo, considerando la cartera de proyectos del MOP.
La autoridad destacó que “sin duda, los que generarán más mano de obra son iniciativas de gran envergadura como, por ejemplo, la tercera etapa del colector de aguas lluvias de Chillán, la reposición de la Ruta de Los Conquistadores y la reposición de la Ruta Chillán – Yungay”.
Rol del sector privado
Héctor Garrido, analista del Observatorio Laboral Ñuble (OLÑ), comentó que “más allá de los empleos directos que puedan generar estas iniciativas, es importante tener en consideración el número de empleos indirectos”.
Asimismo, destacó que “dado que el foco está centrado en la construcción de infraestructura para la región, esto tendrá un efecto que permitirá afrontar desafíos históricos en cuanto a, por ejemplo, conectividad, lo que tiene también un efecto sobre el empleo, aunque con una mirada de largo plazo”.
Respecto al rol del sector privado, Garrido manifestó que “es el motor de la economía, sin embargo, frente a la incertidumbre, la inversión y la economía en general, tiende a paralizarse. No sólo es el caso de las grandes inversiones, sino inclusive a nivel de consumo de bienes durables (viviendas, autos, etc.). Es en estos momentos cuando se suelen aplicar políticas contracíclicas que apuntalan a la economía por parte del Estado. Esto no es nuevo, ya lo planteaba Keynes como respuesta a la gran depresión. Sin embargo, esta crisis tiene una naturaleza única que trae consigo sus propios desafíos”.
En esa misma línea, Renato Segura, director del CER Regional, aseveró que “la inversión pública por sí sola es incapaz de recuperar el empleo perdido. Sin embargo, la señal que subyace sobre el anuncio y materialización del plan de inversiones públicas tiene la virtud de estimular la recuperación económica. Empero, muchas de las empresas de la región vienen arrastrando deudas, las que se han acumulado durante esta etapa de emergencia sanitaria. Esta carga financiera, quita velocidad a la recuperación, arriesgando con ello un aumento de la pobreza dura (aquella que es refractaria a los incentivos para retornar a la fuerza laboral)”.
El investigador aseveró que “la recuperación del empleo requiere de la reactivación de la actividad económica. En este sentido, el que tira el carro es la empresa privada, principal agente económico que tiene la capacidad de recuperar los empleos perdidos. Por ello, junto con aplaudir el plan de inversiones públicas, es necesario imprimir velocidad en la recuperación de las pequeñas y medianas empresas de Ñuble. La economía local está enfrentando una carrera contra el tiempo. Para revertir el aumento de la pobreza en los hogares de Ñuble, se necesitan medidas urgentes para quitar la mochila de deudas que acumulan las pymes y que le limitan su capacidad de reacción”.
En ese contexto, Segura advirtió que “junto con las medidas que están impulsando algunos parlamentarios de la región, es necesario profundizar en una política de refinanciamiento de los pasivos de aquellas pymes con mayor potencial de recuperación de sus flujos de caja. Para financiar dicha medida, se puede emitir un bono soberano con el objetivo de condonar multas e intereses, reprogramar la deuda tributaria, recomprar la cartera de pasivos, aplicar un refinanciamiento con 18 meses de gracia e indexado con la generación de flujos de caja que son capaces de generar las empresas beneficiadas”.
Resumió que “a través de una mayor actividad económica, el sector privado tiene la capacidad de recuperar el empleo perdido. El Estado tiene la capacidad y los instrumentos para acelerar la recuperación económica”.
Empleos en el corto plazo
Por su parte, el senador Felipe Harboe sostuvo que “no hay evidencia que permita señalar que efectivamente se van a crear esos 3 mil puestos de empleo, puesto que por ejemplo, el Presidente anuncia la ruta Chillán-Yungay, y la verdad es que eso todavía está en diseño y probablemente a fines de 2021 comiencen las obras, cuando son temas de diseño, generalmente los ingenieros vienen de Concepción o Santiago, entonces este tipo de anuncios ponen en duda la generación de más empleo”.
En segundo lugar, dijo que “el problema que tenemos principalmente no es de falta de voluntad de contratar de parte del sector privado, sino probablemente, la imposibilidad por la precariedad económica en que se encuentran las empresas o la imposibilidad de realizar obras dadas las restricciones, o el caso de la industria turística, en que lamentablemente, el centro de esquí decidió no abrir finalmente, a pesar del permiso, y eso generó un impacto muy negativo en todas las pequeñas empresas que dependen del centro turístico, como el Valle Las Trancas, y todos esos negocios generan empleo, pero vamos a pasar una temporada invernal sin empleo para ellos, y lo que es peor, con riesgo de que se cierren gran parte de esos emprendimientos”.
En esa línea, el senador planteó que se requiere complementar el plan con otras medidas. “Evidentemente, lo que se requiere, es que de una vez por todas tengamos una ejecución presupuestaria, por ejemplo, de los proyectos del Gobierno Regional, que sea mucho más audaz, y que además, tenga la virtud de que se prioricen todos los proyectos que generen empleo, no los diseños, hoy es tiempo de obras. Y además, que el Gobierno Regional priorice las compras en proveedores locales, porque cuando uno ve que participan apenas con el 28% de las compras del sector público en la región, uno se pregunta cuál es el esfuerzo que está haciendo el Gobierno Regional; probablemente, desde el punto de vista económico puede ser más eficiente comprar en Concepción o Santiago, pero en este momento las autoridades deben entender que no son directores de empresas, sino que hay que ver la rentabilidad social, por ejemplo, si las cajas de alimentos hubiesen sido compradas en la región, probablemente habríamos reactivado esas empresas”.
Volviendo al plan de reactivación, Harboe criticó que “básicamente, son los mismos proyectos, y para comprobarlo, basta con ver los proyectos que contiene el plan Ñuble que se anunció cuando se creó la región. ¡Es prácticamente lo mismo! Entonces la pregunta es ¿por qué se repite lo mismo como una cosa nueva? Claro, incorporó la Ruta Chillán-Yungay, pero aún está en diseño. ¿Por qué pone el Hospital? Ése es un proyecto que viene del Gobierno de Bachelet. Yo pienso que el Presidente debería tomar la decisión respecto del Punilla en dos meses, no en seis meses, y ahí sí se genera mucho empleo y un impacto inmediato. Llevamos dos años ya con el Punilla, va a terminar el Gobierno moviéndose el plazo, a mí me parece que eso no corresponde, si este proyecto quedó adjudicado en el gobierno de Bachelet, la inversión pública no puede ser tan lenta”.
El legislador PPD anticipó que “vamos a tener un aumento del desempleo de no mediar decisiones muy audaces, la proyección que hay es que las cifras de invierno van a mostrar un aumento, porque estacionalmente se comporta así, pero además, este año no se compensará con el turismo. Y a eso agregamos que si el Gobierno no anuncia prontamente la extensión del seguro de cesantía hasta diciembre, no solo vamos a tener desempleo, sino que el cierre masivo de locales que cuando termine la vigencia de las suspensiones de contrato no van a poder siquiera pagar los finiquitos, y eso sería un problema mayor”.
Finalmente, el parlamentario reiteró la necesidad de presentar un plan de salvataje a la industria turística y gastronómica. Comentó que se ha reunido con distintos gremios y con el subsecretario de Turismo, así como también con el ministro de Hacienda, y recordó que le plantearon a las autoridades un paquete de medidas.
“Hay que mejorar la oferta”
Para el diputado Jorge Sabag, la meta de crear 3 mil empleos se ve lejana. “Es una apuesta arriesgada, lo veo difícil porque creo que se requiere una inversión mucho más audaz, también este recorte de $5.250 millones del presupuesto regional no es una buena noticia, son recursos que el Consejo Regional podría haber destinado a proyectos para la región. Creo que hay que mejorar la oferta, hacer proyectos más intensivos en mano de obra, que permitan la reactivación”.
El parlamentario también apuntó a la ausencia de nuevas iniciativas en el plan. “Por ejemplo, el proyecto de la ruta a Yungay ya estaba en la carpeta de inversiones, por lo que sería novedoso que se adelantaran las etapas y se acelere su proceso, de manera que podamos tener varios frentes de trabajo; en esa línea yo agregaría que es muy importante y estratégico para la región de Ñuble iniciar ya la construcción del puente en la desembocadura del río Itata, porque unirá dos regiones y va a permitir incorporar una zona que ha estado invisibilizada, con un potencial pesquero y turístico, esa obra, que también está en etapa de diseño, también sería intensiva en mano de obra cuando se construya”.
Además, comentó que debieran abordarse las etapas pendientes de la Ruta 148 Bulnes-Quillón, puesto que hasta ahora se ha ejecutado un tercio, y dado que el diseño está hecho, sostuvo que se podría ejecutar con prontidud.
Desde la perspectiva del sector privado, Sabag apuntó que “debe jugársela, por eso se han creado una serie de incentivos tributarios, como la depreciación instantánea; también tiene que haber incentivos para que las empresas no cierren, y esos incentivos están faltando. Recordemos que el acuerdo político estimó un gasto fiscal de US$12 mil millones para la reactivación económica, y de ahí se pueden destinar recursos para incentivos tributarios, de ese monto se han destinado cerca de US$8 mil millones para los proyectos que han sido aprobados, por lo que todavía hay un espacio”.
Igualmente, advirtió que los créditos Fogape no han sido la respuesta para muchas pymes, particularmente de los sectores turismo y restaurantes. “Ha sido lento, la banca no ha entregado todos los créditos que se necesitan, se suponía que serían un millón de créditos, y no vamos siquiera en 200 mil”.