Señor Director:
A pesar del complejo escenario actual para el bolsillo, son muchos los chilenos que cuentan con ahorros en el banco, ya sea porque han podido ajustarse el cinturón o gracias a los retiros de la AFP. ¿El problema? El dinero vale cada vez menos con la creciente inflación y va a depender de dónde lo tengamos guardado si podremos generar algo de rentabilidad.
En ese contexto, contamos actualmente con 2 instrumentos útiles de ahorro: primero están los depósitos a plazo. Esta modalidad se hace en pesos y da un interés mensual. Suelen ser a 30, 60 y 90 días y se puede ir renovando. A pesar de que no se puede retirar cuando uno quiere, si se puede contar con este dinero en cortos intervalos de tiempo.
Y en segundo lugar están las cuentas de ahorro en UF, que si bien consideran un interés, es bajo la condición de no realizar más de 3 giros al año con un tope máximo. ¿Qué pasa si hago más de 3 giros? Se pierde el interés y tu saldo no se reajusta. Es decir, es como si la hubieses dejado en la cuenta.
Entonces, ¿es posible proteger nuestros ahorros de la inflación? Va a depender de las necesidades que se tengan. Por ejemplo, si tengo 1 millón en el banco y no los gastaré por un tiempo, lo recomendable sería ponerlo en la cuenta de ahorro en UF hasta que decida sacarlos.
En tanto, si tuviese ese millón pensado para comprar algo en 2 o 3 meses, la recomendación es ponerlo en un depósito a plazo. Si bien el valor del monto se depreciará un poco, no lo hará tanto como lo haría en la cuenta corriente. Sea la alternativa que sea, es importante que aprovechemos los instrumentos disponibles, ya que el banco no nos entrega nada por tener nuestros ahorros descansando en la cuenta.
Matías Lazcano