Señor Director:
Al conocer las resoluciones de la Comisión 27/F sobre las responsabilidades de las autoridades del gobierno de la época, y en particular de quien dirigía la Onemi, Carmen Fernández, y que quedó inmortalizada en un video oficial, donde las escenas mostraban a todos los personajes, a la ex presidenta Michelle Bachelet junto a los actores de reparto, como en una obra del absurdo, todos buscando a un director, porque claramente se observaba una total falta de liderazgo y coordinación. Lamentablemente, nada funcionó, malas decisiones, peores instrucciones a la población, el “no habrá un tsunami asociado al gran terremoto” tal vez fue la frase que marcó el punto de inflexión en la vida de muchos chilenos, era evidente el caos, la actuación de los actores simplemente demostró inexperiencia, improvisación, una verdadera comedia de equivocaciones.
Al parecer, la frase de moda de los presuntos responsables de tener una respuesta tan deficiente ante el terremoto y posterior tsunami ocurridos el 27/F fue literalmente “Sálvese quien pueda”. Todos, casi sin excepción, le cargaban la cuenta del SHOA. Un abogado de la encargada de Onemi acusaba al SHOA por dar información falsa, a su vez, el fiscal que investigaba acusaba que las omisiones de Carmen Fernández, durante la noche del 27/F, incrementaron los riesgos de la población ante la llegada de las olas
Cabe mencionar que más allá de los dictámenes de la justicia, aún hoy, a 10 años de la tragedia, hay chilenos que esperan concluyentes explicaciones, y lo peor de todo, la conclusión de muchos expertos, de que todo fue una muy trágica noche para un grupo de compatriotas, pero absolutamente evitable en cuanto a la pérdida de vidas humanas.
Tal vez, lo que más demostraría que las instituciones encargadas de nuestra seguridad estaban muy mal preparadas, es que un informe que envío el Centro de Observación de Tsunamis del Pacifico en Hawaii, a 5 ó 6 minutos de ocurrido el terremoto, que indicaba una alta probabilidad de tsunami en nuestras costas, no pudo ser leído, y menos comprendido, porque la persona encargada del SHOA no hablaba inglés, el cual fue reiterado 21 minutos después, por Hawaii, para saber si había sido comprendido. A pesar de esa crucial información, nunca se dio la orden de evacuar la costa.
Luis Enrique Soler Milla
