Conforme al último balance realizado por la Seremi de Medio Ambiente de Ñuble, respecto al Plan de Prevención y Descontaminación Atmosférica (PPDA), vigente para los contaminantes MP10 y MP2,5, para las comuna de Chillán y Chillán Viejo, se pudo determinar que los episodios críticos de este 2022, fueron 38 en total.
Con los antecedentes a la vista, el seremi del ramo, Mario Rivas, explicó que durante todos los meses de la ejecución de la Gestión de Episodios Críticos (GEC) 2022, que arrancó el 14 de abril, se pudo constatar que esa cifra representa una disminución del 24% en comparación a los casos registrados en el año 2021, “pero si lo comparamos con el año 2018, cuando inició la región, observamos una disminución del 50%”.
[bg_collapse view=”button-orange” color=”#4a4949″ expand_text=”Leer más” collapse_text=”Menos” inline_css=”width: 100%” ]Cabe destacar que, en los 183 días de medición de la calidad del aire, esos 38 episodios críticos se pueden desglosar de la siguiente manera; 23 días de alerta sanitaria, otros 10 de preemergencia y , finalmente, de cinco días en emergencia.
En cuanto a su intensidad también destaca la baja en número de episodios de emergencias y pre-emergencias, lo que representa una mejor calidad de aire para los habitantes del territorio.
En cuanto a las fiscalizaciones, se realizaron alrededor de 35 controles a fuentes fijas industriales, constatándose que existió un buen comportamiento ante periodos de restricción operacional. En cuanto a las inspecciones realizadas en las fuentes fijas domiciliarias se lograron fiscalizar la totalidad de los eventos críticos pronosticados en el periodo GEC 2022.
Por su parte, el jefe regional de la Superintendencia de Medio Ambiente, Cristian Lineros, recalcó que durante este año hubo un trabajo específico orientado al comercio formal de leña y otros regulados.
“El stock de leña mermó a la baja significativamente, complementado con el déficit la demanda de pellet. En el periodo 2022, se formularon dos cargos por incumplimientos uno por venta de leña húmeda a una cadena de multitienda nacional y otra por ausencia de monitoreos en rubro hotelería”, complementó.
Actualmente, la región mantiene en curso dos programas de cumplimientos asociados a fuentes fijas industriales los que deben materializar sistemas de abatimiento.
A la fecha se continúan se suman fuentes fijas que han optado al cambio de matriz energética como Frigosur y Danone, empresas que hoy en día no están expuestas a restricciones operacionales en episodios GEC. “Muchas de ellas han optado por el gas”, especificó.
Balance GEC 2018-2021
Al hacer una comparativa más amplia, que considera las mediciones realizadas entre el 2018 y el 2021, los registros de la Seremi del Medio Ambiente, demuestran una constante disminución en relación a los últimos años, por lo que se concluye que se debe continuar con la implementación de las medidas, destacándose la gestión de FNDR para el Programa de Recambio de Calefactores, así mismo, el trabajo de fiscalización y las buenas condiciones atmosféricas como parte de la explicación de esta baja.
Ahondando en esta estrategia, en la Seremi destacan que en cuanto al Programa de Recambio de Calefactores, gracias a la adjudicación de dos Fondos Nacionales de Desarrollo Regional FNDR por $4 mil millones cada uno (FNDR 2019-2020 / FNDR 2020-2021) además del financiamiento sectorial por parte del Ministerio del Medio Ambiente, desde la creación de la región de Ñuble se ha logrado disminuir la brecha significativamente en un periodo de tres años, destacándose la incorporación de líneas piloto de aire acondicionado como equipo de recambio, contabilizándose a la fecha un total 7.905 equipos instalados.
Ampliación de las comunas
Otra de las novedades que hubo este año en materia de controles, fue la ampliación de los polígonos de fiscalización, siendo uno de los principales beneficios el que los vecinos que habitan esos sectores pudieron postular al Programa de Recambio de Calefactores de la Seremi del Medio Ambiente, cuyos llamados comenzaron a mediados de abril.
Por otra parte, se está avanzando en la creación de la Macrozona del Valle Central de Ñuble, que significa un Plan de Descontaminación no solo para Chillán y Chillán Viejo sino que comprendería los centros urbanos de las comunas de Bulnes, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Coihueco, Pinto, Quillón, San Ignacio, El Carmen, Pemuco y Yungay, que se sumarían a Chillán y Chillán Viejo bajo el PPDA, alcanzando un total de 414.757 habitantes, lo que corresponde a más de un 86% del total de la población de Ñuble.
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