Millonarios recursos están siendo invertidos en Chillán y numerosas comunas de Ñuble para satisfacer una de las necesidades más urgentes que han surgido en el ámbito regional, como es la modernización de aceras o veredas.
Las propuestas, nacen de los evidentes problemas que tienen los transeúntes, sobre todo en las zonas céntricas de las ciudades, donde se han multiplicado las caídas, que afectan principalmente a las personas de la tercera edad y con movilidad reducida.
Las iniciativas más cuantiosas se están desarrollando en la capital regional, pero en muchas otras comunas hay constantes quejas de las comunidades para que los municipios se hagan cargo de los problemas que se observan en calles y avenidas.
El actual contexto de la pandemia, ha llevado además a que la comunidad se sensibilice mucho más respecto de este tema, considerando que las caminatas en las áreas céntricas se han incrementado.
El alcalde de Ránquil, Benito Bravo Delgado, destacó que en la comuna “hemos trabajado con el Ministerio de Vivienda y Urbanismo y el Serviu con el fin de reparar muchas arterias que por diferentes motivos no dan seguridad a nuestros vecinos”.
Bravo, recalcó que “lo que se busca con este tipo de proyectos es dotar a nuestras ciudades de las condiciones de dignidad y equidad que piden los ciudadanos, lo que se evidencia en sondeos de opinión donde ese tema está entre los más prioritarios”.
En el caso de Chillán, la municipalidad venía desde hace un tiempo proyectando un desarrollo a gran escala de aceras, presionado sobre todo por las enormes falencias que se observan en gran parte de la ciudad.
El asesor municipal, Antonio Arriagada, resaltó que “un deber ineludible de las autoridades comunales es preocuparse de las calles; su abandono es reflejo de la baja preocupación de la autoridad y no preocuparse de las vías publicas constituye una irresponsabilidad”.
Por lo anterior, destaca, “me parece una manera de ponerse al día con los ciudadanos ejecutar programas de arreglo de calles y aceras que permitan a Chillán seguir siendo reconocida como la ciudad acogedora y caminable, sin peligro de accidentes”.
El alcalde Sergio Zarzar, destacó que en el caso local, “una de las mayores demandas de la comunidad es el mejoramiento de las aceras. Por esa razón, en los últimos años hemos estado ejecutando varios proyectos de conservación postulados a distintas fuentes de financiamiento sectoriales y regionales, beneficiando a diferentes poblaciones de nuestra comuna, y ahora en la zona céntrica con fondos regionales”.
“Todos estos proyectos de conservación de veredas entregarán mayor seguridad a los peatones y además incorporan los accesos universales para que todos los vecinos y vecinas de nuestra comuna transiten de manera más tranquila”, subrayó la autoridad.
La municipalidad, se encuentra actualmente en un proceso de conservación de veredas en diversos sectores de la ciudad, en un trabajo en conjunto con el Minvu. En este marco, se actualizó el catastro de la red vial, lo que evidenció un déficit de repavimentación de veredas del 25% correspondiente a 27.800 m2 aproximadamente.
Con respecto a la conservación de veredas en la ciudad, desde Secpla se expuso que durante los últimos dos años, han sido intervenidos sectores como Ultra Estación, las poblaciones Coihueco, Luis Cruz Martínez, Mardones, El Tejar, Vicente Pérez Rosales y Purén, donde se realizaron obras por 15.026 m2, con una inversión de $869.654.000.
En tanto, el alcalde destacó que a través del programa de Pavimentación Participativa se financiaron 6.056 m2 de veredas que comprenden pavimentación y repavimentación con una inversión de $205.904.000, en seis sectores de la ciudad.
Actualmente, la Municipalidad se encuentra a la espera de financiamiento para la ejecución de 5.706 metros cuadrados de veredas, que se ejecutarán en la Avenida Andrés Bello por ambos costados y la calle Flores Millán.
Adicionalmente, durante este año se han postulado a fondos regionales y ante el Serviu un total de 2.136 m2 de veredas.
Aceras Covid
El secretario Rrgional ministerial de Vivienda, Carlos Urrestarazu, informó en tanto, que el Minvu renovará 17 kilómetros de veredas en diez comunas más vulnerables de Ñuble.
En San Ignacio, Ñiquén, El Carmen, Pinto, Ránquil, Ninhue, Trehuaco, Cobquecura, Portezuelo y Pemuco.
Con esta iniciativa, destacó la autoridad, “se facilitará el desplazamiento de las personas, lo que permitirá avanzar hacia la etapa de desconfinamiento post Covid-19 en Ñuble”.
Urrestarazu valoró que “un total de 17 kilómetros de veredas serán intervenidas y recuperadas por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), para facilitar el desplazamiento de las personas cuando las comunas avancen hacia la etapa del desconfinamiento”.
Según informó el seremi de Vivienda, “invertiremos $1.700 millones para ayudar a los municipios más pequeños, aquellos que no disponen de un buen presupuesto para este tipo de obras y donde existe mayor población en condiciones de vulnerabilidad. Sin duda cambiaremos enormemente la calidad de vida de los vecinos y vecinas de estas diez comunas”.
Se espera, destacó la autoridad, que la revisión de las obras integradas en el “Programa de Conservación de Veredas” del Minvu y municipios comience antes del 31 de marzo.
De esta forma, destacó Urrestarazu, “se dará paso al proceso de licitación, para así comenzar con la etapa de ejecución de las obras a partir del segundo semestre de este año. Con ellas, se pretende mejorar las condiciones de circulación de las personas en el espacio público, proveyendo más y mejores espacios para el peatón que le permitan mantener el distanciamiento y la fluidez del tránsito e incluso descongestionar las filas”, enfatizó el titular de la cartera en la región.
Urrestarazu, hizo hincapié en que “con esto no solo mejoramos la condición de movilidad de las personas, sino que también ayuda a la reactivación económica de la región”.
Planteó que “el natural temor al contagio, ha generado una tendencia al uso de modos no masivos de transporte, posicionando la caminata como la alternativa más utilizada y segura”.
Sin embargo, destacó, “no todas las áreas urbanas tienen la misma condición en su infraestructura, por lo que existen muchas ciudades medianas y pequeñas que presentan un alto déficit urbano, del cual las veredas son un componente estructural, sobre todo en los sectores más vulnerables de Ñuble”.
Serviu
En tanto, el director regional del Serviu, Álvaro Pinto, destacó que la entidad que dirige lleva a cabo un plan conocido como “Normalización y mejoramiento Rutas Peatonales Región de Ñuble”.
Pinto planteó que “el objetivo de esta intervención es mejorar las condiciones de desplazamiento peatonal en el espacio público de la región donde destacan las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Carlos y Portezuelo.
Para ello, destacó, “se propone la ejecución de obras de mejoramiento de veredas seguras, accesibles y equipadas. El programa de Normalización y Mejoramiento de Rutas Peatonales, tiene como objetivo ejecutar un plan de inversiones que colabore en la activación económica del país, mediante la ejecución masiva y con calidad, de obras civiles de veredas, escaleras, senderos u otra infraestructura en el espacio público para el correcto y seguro desplazamiento peatonal”.
Este proyecto, incluye iluminación peatonal, veredas más anchas, mobiliario urbano, huella podo táctil, dispositivos de rodados de acuerdo a la normativa, arborización, entre otros elementos.
Ciudad Inclusiva
En este sentido, el principal proyecto de este tipo se realizará en la capital regional, a través del proyecto de “Conservación veredas centrales Chillán, ciudad Inclusiva”.
Esta obra del Serviu esta a cargo de la empresa Constructora Santa Sofía y tiene en estos momentos un 13% de avance físico. La propuesta busca que la comunidad “pueda disfrutar libremente de todos los espacios físicos, políticos, y sociales, ejerciendo de igual manera el derecho a una vivienda adecuada y a tener acceso a los bienes y servicios públicos”.
Esta iniciativa, que se encuentra fundamentada en el mal estado general de las aceras del centro de Chillán en la actualidad, está coordinado con el municipio. Para los trabajos, se ha definido un polígono de intervención que comprende la calle Bulnes, entre 5 de abril y Carrera, las calles Arauco, 18 de septiembre y Carrera, entre Vega de Saldías y Libertad y 5 de abril, entre Bulnes y Libertad.
La inversión global de esta propuesta de desarrollo urbano que se ejecuta en calidad de piloto a nivel local es de $1.243.426.181.
El plan, busca generar veredas continuas, sin obstáculos, permitir un desplazamiento cómodo de dos personas, entre otros beneficios.