Señor Director:
Una fracción importante de la clase media chilena caerá en la pobreza debido a la pandemia y que otra porción significativa quedará en una situación de vulnerabilidad aún mayor, mostrando la peor cara de un modelo que se jacta de haber reducido dramáticamente la pobreza en Chile, de un 40% en 1990 a un 9% en 2019, pero que fue a cambio de endeudarse de por vida. Esa es la gran verdad que los gobiernos en general, y éste en particular, no han logrado comprender.
El motor de la economía no es la banca, sino la clase media, esa que trabaja y hace que las empresas de bienes y servicios marchen y funcionen. No podemos caer en la utopía de que de esta crisis que afecta al 90% de las familias del país se soluciona con los programas “piñuflas” que ha ofrecido esta segunda administración de Piñera, que pasará a la historia por ser la que le puso la lápida a la clase media chilena.
Juan Pedro Cid Hernández Profesor de Biología