El poder de la lencería: cómo la ropa interior puede elevar tu autoestima
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La lencería es uno de aquellos placeres que las mujeres aman, por ser prendas femeninas por excelencia, que se llevan como un secreto bajo la ropa. La gran variedad de sostenes y calzones, más otros complementos, como los portaligas, permiten su ajuste a los distintos gustos y tipos de cuerpo.
Estas prendas íntimas no solo tienen fines prácticos y estéticos, sino también poseen la cualidad de ser un elemento que ayuda a elevar la autoestima de las mujeres. ¿Quieres saber cómo? Te invitamos a seguir leyendo.
Lencería: el elemento esencial para fortalecer la autoestima
No cabe duda que el trabajo que se debe hacer para recuperar o reforzar la autoestima comienza en el interior, tomando conciencia de tu valor como persona, de tus cualidades, de lo que te hace única y especial, tanto en personalidad como en lo físico, amándote por sobre todo, con tus defectos y virtudes.
Sin embargo, como este proceso de fortalecimiento de la autoestima puede ser largo, puedes darle un empujón con pequeños detalles que te ayuden a reforzar esa seguridad y confianza en ti misma, y para ello, la lencería es un excelente elemento para reafirmar tu amor propio.
La lencería te entrega una primera capa de ropa que nadie más que tú la ve. Esto vendría a ser como una analogía de la situación emocional: te pones algo lindo (pensamientos amorosos hacia ti misma) aunque nadie más los vea. Por eso, es importante que estas prendas sean bonitas, y también cómodas, como un reflejo de amor propio.
Comodidad ante todo
En ese sentido, la comodidad de la lencería es determinante en la actitud con la que te presentas ante el mundo. Si andas con ropa incómoda, se notará, y la ropa interior, al ser la primera capa, tiene que ajustarse bien a tu cuerpo, sin apretar ni provocar irritaciones.
El ajuste de estas prendas también será determinante en cómo te sientas con ellas. Por ejemplo, un sostén de una copa que no es la tuya, te puede hacer aparecer un rollito que ni sabías que tenías, y eso podría crearte una inseguridad, cuando en realidad esta surge del desconocimiento y de expectativas que tal vez son irreales.
¿Cómo buscar la lencería adecuada a tu cuerpo?
Lo mejor que puedes hacer es analizar tus prendas actuales, observar las características que más te gustan y que mejor se adecuan a tu cuerpo, y buscar aquellos similares que te ayuden a realzar tus cualidades físicas.
Conocer tu tamaño de copa y de contorno serán un buen comienzo para ir a comprar sostenes. Si tu busto es pequeño y quieres realzarlo, puedes buscar aquellos con algo de relleno o push up, que te ayuden a destacar esa zona. Por el contrario, si tus senos son grandes y quieres afirmarlos, escoge aquellos sin relleno, de copa completa, y con tirantes gruesos para una mejor sujeción sin riesgo de irritación en los hombros.
En cuanto a los calzones, existen también diversos modelos. El encaje siempre será una opción femenina y bonita que favorece cualquier tipo de cuerpo. Por ejemplo, para resaltar caderas y trasero, las pantaletas son una gran opción, pero si te incomodan, puedes usar un calzón tipo bikini que es cómodo y siempre luce bien. Recuerda tener en mente tu talla y la elasticidad de la prenda, para evitar que se hunda en los costados, produciendo rollitos indeseados.
¡Demuéstrate amor propio con lencería bonita y cómoda que te ayude a destacar lo mejor de tu cuerpo y reforzar tu autoestima!