De acuerdo al Departamento de Estadísticas e Información de Salud (Deis) del Ministerio de Salud, durante el mes de junio en la región de Ñuble, las muertes por Covid-19 (31), ya sea por caso confirmado o probable, ocuparon el segundo lugar en la estadística de defunciones, siendo los tumores malignos la primera causa, que acumulan un total de 46.
Sin embargo, al desglosar los diferentes tipos de cáncer, que afectan el aparato digestivo, los genitales femeninos o masculinos, el cáncer de mamas o aquellos considerados “desconocidos”, el coronavirus se sitúa como la primera causa de fallecimiento en la región durante durante este mes.
Para el académico y epidemiólogo de la Universidad de Santiago de Chile, Usach, Christian García, las cifras revelaron que la gestión de la crisis sanitaria no ha sido la esperada, ya que no se han tomado las medidas a tiempo para frenar el contagio y los decesos, como la cuarentena.
“En estos tres meses que tenemos el virus en Chile, ha causado muchísimas muertes, que era todas evitables, porque si nosotros prevenimos los contagios, hacemos cuarentena de manera anticipada, antes que los casos aumenten de manera importante, todo este proceso se puede reducir, reducir la curva, los casos, las hospitalizaciones y también las muertes, como se hizo en países como Nueva Zelanda que actuaron rápido y profundo y protegieron a su población de contagios y muerte”, explicó.
Para el experto la medida clave para evitar más fallecidos no solo en el Ñuble y en Chile es la cuarentena, la cual si se hubiese determinado desde un principio de manera rápida, fuerte y profunda habría sido menor el impacto del virus.
“Porque los países que hacen su cuarentena efectiva y profunda han tenido menos casos y menos fallecidos. Ahora como el caso de Chile, se pone primero la economía para tener el comercio funcionado, claro es una decisión que lleva por detrás mayor cantidad de personas contagiadas y fallecidos”, indicó.
“Por lo demás, en Chillán al menos ya tiene casos hace varias semanas muchos más altos de lo que tenían cuando decretaron la primera cuarentena, por lo tanto, ya deberían estar en cuarentena hace mucho rato nuevamente”, recalcó.
En su evaluación recogió ejemplos del manejo de la pandemia en otros países, que han destacado por su capacidad de respuesta, lo que ha permitido mantener a raya el Covid-19.
“Tenemos casos que han tenido un impacto mucho menor, que han actuado a tiempo. Los mejores ejemplos son los países del Asia y Nueva Zelanda que actuaron de manera temprana, aquí se actúo tarde. El punto no es la cuarentena, sino cuándo se hizo, porque cuando tienes muchos casos, el efecto será mucho menor y vas a tener un número importante tal vez de casos fallecidos. Me sorprende que en Chillán no tengan una segunda cuarentena, porque tienen más casos cuando estaban en la primera”, sostuvo.
Mientras que no exista una cura para el coronavirus, el aislamiento de las personas siempre prevalecerá por sobre otras recomendaciones, destacó el docente.
“Ante la ausencia de una vacuna o un tratamiento que se efectivo, lamentablemente el distanciamiento de las personas es la medida, mientras que no baje la curva de manera importante por un tiempo consistente y permanente no vamos a poder regresar a la normalidad”, dijo.
En su análisis, el expresidente del Colegio Médico, Carlos Rojas, reconoció que el número de fallecidos durante junio es importante, sin embargo, destacó que la tasa de letalidad, es decir la cantidad de personas que mueren por la enfermedad en la región, es baja a nivel nacional.
“Aparece como encumbrado el dato de fallecimientos por Covid, pero hay que situarlo dentro de una tendencia desde marzo en adelante, y en ese sentido, la verdad es que se ha mantenido Ñuble con una letalidad, entre 1,5% y 2%. En este momento es de 1,3% en Ñuble, por lo que sigue siendo una letalidad muy baja, es decir, de 100 pacientes contagiados, muere 1,3”, explicó.
Según el médico hay varias razones que explicaría la disminución de este indicador en particular.
“Probablemente esto no es solamente en Ñuble, la letalidad en Chile ha sido baja. Ahí hay muchas explicaciones, se señaló que una de las causas, es que hay dos grandes cepas de este virus. La “L”, que aparentemente es la más virulenta y que ha provocado más muertes, afectó a los países de Europa y la “S”, que es de comportamiento más benigno y habría afectado acá. La segunda, es que acá tenemos poca gente enferma de otras cosas. Los hipertensos y diabéticos son de alto riesgo, y si tenemos poca población con estos factores, probablemente la mortalidad será menor también”, detalló
Además, hay otros factores como “la cobertura BGE, cuando nacen los niños para tuberculosis, que se ha mencionado por factor protector, y también la capacidad sanitaria, aquí no se ha llegado a un copamiento de la UCI”, agregó el profesional.