A menos de una semana de que se levante el estado de alerta roja para la Región de Ñuble, decretado a principios de este mes, desde la Conaf confirmaron en su último balance que ya solo hay dos incendios en combate (en Quillón y en Ninhue), de los nueve activos que se registran en las comunas de Ñuble.
Si bien es una noticia positiva dentro del contexto de la catástrofe que dejaron los siniestros forestales de la historia de la región, en la Conaf no pierden de vista que como sumatoria de la temporada estival 2022-2023 se superó en un 24% la cantidad de incendios de la temporada anterior, es decir se pasó de 347 a 429.
Lo mismo se puede contar con un tono más grave si esta vez la variable es la cantidad de hectáreas quemadas. De 4.485 hectáreas quemadas en el periodo pasado se aumentó a un histórico guarismo de 68.230, lo que representa no solo un 1.421% más, también representa el 5,16% del total de Ñuble. Por esto se considera que el que afectó, solo a Quillón, con cerca de 27 mil hectáreas, es uno de los 10 más grandes del siglo en Chile.
Si la historia no ha sido peor es porque los brigadistas de Conaf, los de las empresas particulares, del Ejército y los voluntarios de Bomberos de todo el país ya han logrado extinguir 359 focos y mantener otros siete ya totalmente controlados. Conaf destaca en este balance que 61 de los incendios de la temporada han afectado a bosques de Corma.
Desde el 1 de febrero
En lo que respecta al combate de los incendios que iniciaron en Ñuble este 1 de febrero, formando parte de los llamados “megaincendios” de la zona centro sur de Chile, junto a los del Biobío y La Araucanía, el director regional de Conaf, Juan Salvador Ramírez, dijo que ya se está trabajando en una etapa próxima al control de los dos que aún siguen en proceso de combate.
“Tenemos recursos destinados en la comuna de Ninhue, en el incendio de Casa Blanca y en Santa Gertrudis de Quillón, con recursos terrestres para seguir trabajando en la etapa de control y su próxima liquidación”, explicó el director.
Ramírez añadió que aún se cuenta con apoyo logístico y humano de Argentina que colaboran con los brigadistas que trabajan por tierra y desde el aire “mientras estemos con botón rojo, es decir en estado de alerta, preparación y coordinación con todas las unidades de emergencia de la Región, producto de los pronósticos de altas temperaturas, de los fuertes vientos y en un contexto regional que aún presenta una gran biomasa combustible”.
En el desglose, la Conaf precisa que el total de cada provincia es de 187 incendios en Diguillín, 135 en Itata y 107 en Punilla.
Las comunas con mayor cantidad de incendios temporada 22-23 son Quillón (45), Chillán (45), Ránquil (37), Coelemu (36) y Coihueco (36)
Carabineros ya ha detenido a siete personas por ser los causantes de incendios en pastizales y matorrales. Los últimos dos casos se registraron el pasado jueves en las comuna de San Carlos y Bulnes, tratándose de dos hombres de 46 y 32 años.
Al respecto, el gobernador de Ñuble, Óscar Crisóstomo, comentó que “el gobierno central y nosotros estamos corriendo con querellas paralelas en contra de quienes resulten responsables”.
