Dieciséis personas, diez de ellas civiles y el resto altos mandos militares, murieron y varias resultaron heridas en un atentado perpetrado por un kamizake el viernes en el centro de Somalia y reivindicado por islamistas radicales, informaron este sábado fuentes de seguridad a la AFP.
“Dieciséis personas murieron, la mayoría civiles”, declaró Abdullahi Suleyman, un funcionario de seguridad local contactado por teléfono.
Los islamistas radicales de Al Shabab, vinculados a Al Qaida, reivindicaron, en un breve comunicado, el ataque que, según ellos, tenía como objetivo al primer ministro somalí Rooble Mohammed Hussein.
El atentado fue cometido a la entrada de un estadio donde era esperado el primer ministro, en el sector sur de la ciudad de Galkayo, a unos 600 km de Mogadiscio, la capital.
Somalia es un país hundido en el caos desde el derrocamiento del régimen militar del presidente Siad Barré en 1991, seguido de una guerra de jefes de clanes y del aumento del poder del grupo Al Shabab, que controló Mogadiscio hasta que fueron expulsados en 2011.
Sin embargo el grupo radical controlando vastas zonas rurales desde las que lleva a cabo operaciones de guerrilla y ataques suicidas, incluso en la capital, contra objetivos gubernamentales, de seguridad o civiles.