Señor Director:
En el Día Universal de la Infancia no solo celebramos la alegría y la esperanza que los niños aportan a nuestras vidas, sino que también debemos reflexionar sobre la persistente necesidad de garantizar que cada niños, niña y adolescente (NNA), sin importar su origen o circunstancias, tenga la oportunidad de crecer en un entorno seguro y enriquecedor.
La Convención sobre los Derechos del Niño, aprobada por las Naciones Unidas este día en 1989, establece un marco sólido que reconoce los derechos fundamentales de todos los niños. Este tratado, ratificado por la gran mayoría de los países del mundo -incluido Chile-, establece que cada NNA tiene el derecho a la vida, a la salud, a la educación, a jugar, a su identidad personal, a participar en las decisiones que les conciernen, a ser protegido contra la explotación y el abuso y a muchos más derechos. Sin embargo, la realidad de muchos sigue siendo una lucha diaria por la supervivencia y la dignidad.
La protección contra la violencia y la explotación debe estar en el centro de nuestros esfuerzos. Los niños no deben ser víctimas de violencia y abusos, ya sea en el hogar, en la escuela o en situaciones de conflicto. Es imperativo que las familias, comunidades, el gobierno y las organizaciones de la sociedad civil trabajen juntos para crear entornos seguros donde los NNA puedan crecer sin temor y desarrollar todo su potencial.
Juan Pablo Venegas
Gerente World Vision Chile