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Inspectores municipales detectaron la existencia de una farmacia que operaba sin patente emitida por la entidad edilicia ni resolución sanitaria de Salud, frente al actual hospital de Chillán en la avenida Francisco Ramírez.
La directora de Seguridad e Inspección, Alejandra Martínez, informó que personal de esta entidad llegó hasta un expendio de medicamentos para verificar su condición legal.
Pero tras solicitar los antecedentes a las personas que trabajaban en el lugar se percataron que el comercio no cumplía aparentemente los requisitos para funcionar de acuerdo a la normativa nacional.
Alejandra Martínez, relató que “mientras inspectores municipales estaban realizando un proceso de fiscalización coordinado con el Departamento de Rentas de la Municipalidad de Chillán, se percataron de un local, que era una farmacia, ante lo cual ingresaron a dicho local para poder pedir la patente y la resolución sanitaria”.
El recinto, acotó, “no contaba ni con patente municipal ni tampoco con la resolución sanitaria. Por tanto, procedimos a infraccionar por tal hecho y a comunicarnos con la Seremi de Salud, ya que esto corresponde a una clausura del local y también a un sumario sanitario”.
Alejandra Martínez agregó que “se unieron ambos equipos de fiscalización y efectivamente este local fue clausurado”.
“Queremos además relevar la importancia de esta fiscalización toda vez que la farmacia comercializaba todo tipo de medicamentos, de los que no sabemos su procedencia, ni la composición, ni fechas de vencimiento y efectivamente eso atenta contra la salud de las personas, más aún en el lugar donde está instalado” esto es frente al hospital”, sostuvo.
