Destacan avances en equidad de género dentro del sistema público de salud

Cada vez que se urga en las estadísticas de los tribunales de esta o cualquier otra región del país, se constata con contundencia el reclamo que por sobre una década ha estado haciendo el Poder Judicial respecto al colapso que han estado sufriendo los juzgados y cortes por un cúmulo de causas, que aumentan en proporciones geométricas para ser resueltas, casi por la misma cantidad de jueces existentes desde el siglo XX.
En Ñuble, la realidad es la misma, pero el relieve lo ponen los Juzgados Civiles de Chillán que desde 2020 han experimentado un alza de ingreso de causas de un 128% conforme a las cifras tabuladas hasta el 7 de marzo de este 2025.
De acuerdo a las estadísticas proporcionadas por la Corte de Apelaciones de Chillán, estos juzgados en 2020 cerraron el año con 589 ingresos, experimentando una baja para 2021 (440) como consecuencia de las restricciones de movilidad y tramitación presencial causada por la pandemia del coronavirus.
Sin embargo, el 2024 cerró con 935 ingresos; y en lo que va del año, el tribunal ha recibido 140 carpetas, es decir, en poco más de dos meses se totalizó casi el 30% del total del 2020.
El presidente de la Corte de Apelaciones de Chillán, magistrado Guillermo Arcos, explicó a nuestro medio que “los dos juzgados civiles cuentan con un juez cada uno, es decir, hay apenas dos jueces que es la misma cantidad que había cuando éstos fueron creados, cuando las circunstancias y la población de Ñuble eran muy distintas a las actuales”.
Otros argumentos apuntan a que aún no se ha podido evacuar las causas que quedaron paralizadas por la pandemia, aunque ya se están dando por terminadas las últimas de ellas.
“Las causas más comunes son las mismas de siempre, es decir, las demandas de indemnización de perjuicios, arrendamientos, problemas familiares de herencia o asuntos de deslindes”, precisó el magistrado.
Considerando que todos los otros tribunales, incluyendo los Juzgados de Policía Local, dependientes administrativamente de cada municipalidad, en el caso de las necesidades de este tribunal por contar con más jueces y más salas, siguen rebotando con la falta de recursos que se le ha asignado en términos generales al Poder Judicial.
Pese a que hoy, la capital regional cuenta con un moderno edificio que alberga el Centro de Justicia, con la Corte de Apelaciones, Familia y ambos juzgados civiles, en estricto rigor la capacidad de respuesta sigue siendo la misma ya que el traslado no significó un aumento de personal administrativo ni de jueces.
El pasado 1 de marzo, el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Blanco Herrera, encabezó la tradicional Cuenta Pública del Poder Judicial, en la que destacó avances en modernización, reformas pendientes y los desafíos que enfrenta la administración de justicia en el país.
En estos puntos, destacó la necesidad de reformar la Justicia Civil.