Una tasa de 10,2% alcanzó la desocupación en Ñuble en marzo-mayo de 2024, según informó el INE, lo que representa un alza de 1,3 puntos respecto a igual periodo de 2023 y sigue mostrando una tendencia al alza.
Se trata de la tasa más alta a nivel nacional, cuyo promedio registró 8,3%, anotando una baja de o,2 puntos en 12 meses.
En tanto, la tasa de desocupación en la Provincia de Diguillín se situó en 11,3%, mostrando un aumento interanual de 2,2 puntos.
Debilidad del mercado laboral
La tasa de desempleo de Ñuble se incrementó debido a que la fuerza de trabajo aumentó 0,6% en 12 meses, mientras que las personas ocupadas disminuyeron 0,8% (1.750 empleos menos) y las desocupadas crecieron 15,1%, alcanzando las 24.580.
En mujeres, el desempleo bajó a 11,7% respecto al 13,2% que alcanzó en marzo-mayo de 2023; mientras que en hombres se empinó a 9,1%, anotando un alza de 3,3 puntos en 12 meses.
La disminución de los ocupados fue incidida por el tramo de 15-34 años, que se contrajo 8,3%.
Asimismo, la baja en los ocupados se explicó por las caídas en agricultura (-11,3%), enseñanza (-11,1%) y construcción (-7,9%). Por otro lado, actividades de salud (26,0%), representó el principal aumento.
Escenario negativo
Bernardo Vásquez, director del Observatorio Laboral Ñuble, explicó que el desempleo se elevó en la región, “por una parte, debido a que en la región hay una mayor cantidad de personas buscando un empleo, que el mercado laboral no ha sido capaz de absorber, y por otra, debido a la disminución en el número de ocupados en sectores relevantes, como la agricultura”.
“En Ñuble, el empleo está fuertemente ligado a las actividades silvoagropecuarias, sobre todo, en primavera y verano. Es por ello que variaciones en el empleo de estas actividades afectan fuertemente al mercado laboral regional y, por ende, es esperable que la desocupación presente aumentos”, planteó. “En particular, para el trimestre marzo-mayo el sector silvoagropecuario concentró el 14,6% del empleo regional, siendo el segundo, tras comercio (16,9%), que mayor empleo genera”, precisó.
El profesional, quien meses atrás descartó que Ñuble llegaría a los dos dígitos, reconoció ayer que, a pesar de indicadores positivos a nivel nacional, en la región se podrían observar mayores tasas.
“Las expectativas económicas del país son positivas, lo que se visualiza con el crecimiento en el Imacec, y que para mayo se espera un crecimiento más moderado, lo que esperamos que también se traslade a las regiones (…) Sin embargo, el escenario base de las proyecciones regionales realizadas se basaban en que la actividades turísticas y comercial se fortalecieran para absorber el empleo en la región en invierno, sumado a las señales positivas en materia económica. Adicionalmente, el alza de la energía eléctrica también debería generar un impacto en el mercado laboral”.
Según Vásquez, “mientras continúan materializándose los mayores incentivos económicos, como la reducción de la TPM del Banco Central, sumado a que la demanda de empleo por parte de las empresas deriva de la producción, debiendo fortalecerse la matriz productiva regional, y que, por otra parte, se han generado mayores expectativas en las personas a buscar empleo, lo que aumenta la fuerza de trabajo, es probable que el mercado laboral no sea capaz en el corto plazo de absorber la mayor oferta laboral en la región, lo que podría implicar, a futuro, aumentos en la tasa de desocupación”.
Matriz productiva
Consultado el gobernador Óscar Crisóstomo, expresó: “sabemos que el empleo en la región tiene una marcada estacionalidad, dada la importancia que tiene la agricultura, por esta razón y como una forma de diversificar la matriz productiva, hemos desarrollado distintos programas de apoyo a las Pymes a través de Sercotec, recursos destinados para los empresarios con instrumentos Corfo y apoyo al rubro turismo”.
La autoridad aseveró que, “lo que uno esperaría son medidas concretas y planes especiales por parte del Gobierno Central para poder disminuir la cesantía. En una región que, además, en los últimos años ha sufrido diversos embates de la naturaleza, lo que afecta indudablemente la economía local”.
Fomento agrícola
El director de la Didepro de la Municipalidad de Chillán, Renato Segura, quien había anticipado esta alza, indicó que la ausencia de una política de fomento agrícola en un escenario complejo para el sector se está traduciendo en una menor demanda de mano de obra. “La menor actividad agrícola es la principal razón por la que no podemos repuntar en el empleo y/o mejorar la calidad del mismo”, subrayó.
En esa línea, hizo un llamado a las autoridades a adoptar medidas innovadoras, “porque claramente, las políticas actuales no han dado los resultados esperados, al contrario, los bajos ingresos en el mercado laboral presionan al alza el desempleo, en un ambiente productivo sin grandes cambios que permitan salir de esta coyuntura. Por eso, le hago un llamado al gobernador regional para atreverse a hacer algo distinto, no podemos esperar a que las soluciones nos lleguen de Santiago. Necesitamos inversiones para potenciar la agroindustria y toda la cadena de valor, sin inversiones no veremos un crecimiento del empleo. Hay una propuesta de los gremios sobre la mesa, que consiste en establecer una Zona Económica Especial Agrícola en toda la región, que permitiría abrir nuevas oportunidades para potenciar la actividad de distintos sectores, como el turismo, el comercio, la construcción, el transporte y la gastronomía, en torno a la atracción de inversiones en la agroindustria. Para echar a andar esta nueva forma de organizar la actividad económica, es fundamental que el gobernador lidere ese proceso”.
