Contrario a algunos pronósticos, la tasa de desempleo en la Región de Ñuble moderó su tendencia al alza en la medición del trimestre móvil junio-agosto de 2020, al anotar un 11% de desocupación, según informó hoy el INE, aumentando en 1,3 puntos respecto a igual período de 2019, pero anotando una caída de 1,1 puntos en comparación con mayo-julio 2020.
Con este guarismo, Ñuble se ubica en la medianía de la tabla, exhibiendo la séptima tasa de desempleo más baja del país, muy por debajo del promedio nacional de 12,9%, tasa que mostró una expansión interanual de 5,3 puntos y una leve caída de 0,2 puntos respecto al trimestre anterior.
El aumento anual en la desocupación se debió al retroceso de los ocupados (-16,4%), con la pérdida de 35 mil 550 empleos netos; y de la fuerza del trabajo (-15,3%), y a que los desocupados disminuyeron 4,5% en 12 meses.
Según sexo, la tasa de desocupación femenina fue 12,5%, aumentando en 0,6 puntos en doce meses. En tanto, la tasa masculina consignó un 10,0%, con un alza de 2,0 puntos.
Leve repunte
La seremi del Trabajo, Yeniffer Ferrada, sostuvo que “la tasa tiene una explicación de una pérdida importante de empleo interanual producto de la pandemia y las restricciones que esta ha traído”.
“Eso sí -continuó-, hay una disminución de más de un punto porcentual respecto al trimestre móvil inmediatamente anterior, y esto es porque el último reporte mide meses en los que la actividad pudo retomar cierta normalidad”, comentó.
La seremi destacó que “el Gobierno ha puesto en marcha iniciativas para contener el impacto de la pandemia en el empleo”, y anticipó que “los próximos boletines contendrán la segunda cuarentena, por un lado, pero además, debiese comenzar a evidenciar la importante demanda de obra estacional que tiene el agro”.
Desaliento
Por su parte, Bernardo Vásquez, director del Observatorio Laboral de Ñuble (OLÑ), precisó que si bien la crisis sigue mostrando cifras muy preocupantes en el mercado del trabajo, de todas maneras, se aprecia un leve repunte. “Por ejemplo, al comparar con el trimestre móvil anterior, se observa un aumento de 2.400 empleos”, sostuvo.
Para el analista del OLÑ, Héctor Garrido, estas cifras confirman un incremento de la actividad del comercio. “Aunque otro factor tiene que ver con que en parte importante del período las restricciones de desplazamiento fueron menores. Por lo que el efecto de la nueva cuarentena podría atenuar el ritmo de recuperación”, especificó.
El analista agregó que llama la atención que, entre ambos períodos, la cifra de personas inactivas se mantiene casi inalterada. Mientras en mayo-julio había 212.620 personas fuera de la fuerza de trabajo, en junio-agosto eran 212.990. “Esto muestra que las expectativas de encontrar un empleo para las personas que están disponibles para trabajar, pero que no buscan un empleo, no han cambiado”, completó.
Sobre este punto, el investigador Renato Segura comentó que “eso es una alerta. En algún momento se pueden incorporar al mercado laboral. En ese minuto veremos la verdadera capacidad de generación de empleos de la actividad económica regional”.
No obstante, manifestó que “por ahora, la estacionalidad y la apertura gradual de la actividad económica van a incidir en una evolución favorable del desempleo”.
