Señor Director:
Hoy que se trabaja en una nueva constitución cabe preguntarse ¿Por qué algo tan básico como tener acceso a una buena salud, no es un derecho para todos? ¿Por qué hay que seguir mendigando por una atención digna? Se ha hecho mucho por disminuir las filas en el consultorio y las listas de espera de cirugías, también se ha discutido sobre la inmoralidad de los precios de los medicamentos. Cómo enfrentar ese costo, es una pesadilla que desgraciadamente no deja dormir a muchas familias.
Todo hacía pensar que parte de la solución llegaría por los seguros, sistemas privados que acumulan riesgo de muchos para entregar ayuda a quien lo necesita. Si esto fuera así debemos reflexionar en cómo hacer que ellos sean más justos, no tan discriminatorios y que apoyados por la tecnología abran la posibilidad de entregar tranquilidad de manera democrática.
Llegó el momento de emparejar la cancha. La salud de los que tienen menos, no tiene por qué ser de mala calidad. Se debe entregar una salud más justa para todos. Fijemos las pautas que marcarán la tranquilidad de todos los chilenos.
Juan Pablo Muñoz Correa
Fundador Seguros Lyfe