Señor Director:
Ad portas de una convención constitucional donde los candidatos a integrarla prometen derechos al por mayor, que no se les olvide uno de los más importantes para las sociedades modernas que sufren con el crimen, la violencia y el miedo al delito: el derecho a la seguridad. Éste ha sido definido como un derecho fundamental por el Comité Interamericano de Derechos Humanos, pero es muchas veces olvidado, irrespetado y no ejercido por las autoridades que deben resguardarlo. Responde a una función privativa del Estado, irrenunciable e indelegable. Es de esperar que sea defendido y consagrado mayoritariamente en nuestra nueva carta fundamental.
Roberto Lagos
Cientista Político