El Servicio Agrícola y Ganadero de la Región de Ñuble presentó hoy una denuncia ante el Ministerio Público solicitando investigar la cruenta matanza de 2 cisnes de cuello negro en la desembocadura del río Itata durante el reciente fin de semana largo.
El descubrimiento fue hecho por el presidente de la Junta de vecinos de Vegas del Itata, Previsterio Riffo Espinoza, quien junto a funcionarios de la Municipalidad de Coelemu dieron aviso a Carabineros del sector y a la Oficina San Carlos del SAG.
Se estima que al menos dos ejemplares fueron cazados. Los responsables sólo dejaron las alas en el sitio, llevándose los cuerpos de las aves.
La caza de cisnes de cuello negro está prohibida por ley, pues son especies en peligro de extinción en Ñuble y beneficiosas para mantener el equilibrio de los ecosistemas.
“La caza es una actividad regulada y está restringida a sólo unas pocas especies. La ley califica como delito la matanza de fauna silvestre protegida y el SAG realizará todo lo que está a su alcance para contribuir a que se detenga la caza ilegal en la región”, sostuvo el Director Regional del SAG de Ñuble, Eduardo Jeria.
El hallazgo se suma a descubrimiento, hace un par de semanas, de un ejemplar de zorro culpeo muerto en la comuna de Ñiquén, al que arrancaron su cola. De acuerdo con los testimonios de vecinos del lugar, no es primera vez que ocurre este tipo de agresiones a especímenes que están protegidos por ley. El hecho fue denunciado a la justicia.
Si bien la normativa actual autoriza la caza en el período comprendido entre el 1 de abril y el 31 de julio o, en el caso de algunas especies, hasta el 15 o 31 de agosto, prohíbe expresamente capturar o cazar a las especies protegidas.
Igualmente, define que la actividad se puede practicar sólo estando en posesión de un carné de caza vigente, inscripción de arma, permiso de transporte de armas vigentes y permiso del dueño del predio donde realizará la práctica de caza. Cabe recordar que el SAG mantiene suspendido el otorgamiento de nuevos permisos de caza en Ñuble mientras se mantengan las medidas de emergencia por la pandemia.
Además, los cazadores deben tener en consideración el horario de toque de queda establecido entre 22:00 y 05:00 horas, y respetar los controles y aduanas sanitarias establecidos en la Región de Ñuble.