Cuidados paliativos ha atendido 1.111 pacientes: 67% de ellos sufre cáncer en Ñuble

Con el compromiso de garantizar una atención digna, humana y centrada en las personas, el Servicio de Salud Ñuble (SSÑ) relevó el trabajo desarrollado por los equipos de la red asistencial en el ámbito de los cuidados paliativos. Esta estrategia busca aliviar el sufrimiento y acompañar a los usuarios y sus familias frente a enfermedades que amenazan la vida o provocan un deterioro progresivo, promoviendo bienestar y calidad de vida en todas las etapas de la atención.
Los Cuidados Paliativos Oncológicos, establecidos en la Ley GES 19.966, fueron incorporados como la cuarta garantía explícita en salud en 2005. En tanto, desde 2022, Chile avanza en la implementación del Programa de Cuidados Paliativos Universales, que amplía la atención a personas con patologías no oncológicas, como enfermedades respiratorias, neurológicas, cardíacas o hepáticas crónicas avanzadas.
“Nuestro compromiso es brindar una atención integral que no solo trate la enfermedad, sino que también acompañe con empatía y respeto a quienes atraviesan momentos difíciles. Los cuidados paliativos universales son una expresión concreta de las prioridades del Gobierno y del Ministerio de Salud: poner a las personas en el centro, garantizando dignidad, alivio del dolor y contención para ellas y sus familias, con apoyo médico, psicológico, social y espiritual”, destacó la Directora del SSÑ, Elizabeth Abarca Triviño.
La directiva enfatizó además que: “En la red pública de salud, los Cuidados Paliativos Oncológicos están garantizados por el GES, mientras que la implementación de los Cuidados Paliativos Universales se desarrolla de manera coordinada, para entregar acceso oportuno a medicamentos, atención domiciliaria, orientación a cuidadores y acompañamiento integral durante todo el proceso asistencial”.
En esa línea, la Referente de Cuidados Paliativos Universales del SSÑ, Dra. Mónica Naveillan Jensen, precisó: “Los cuidados paliativos no se limitan al final de la vida, sino que comienzan desde el diagnóstico de una enfermedad grave. Se enfocan en mejorar la calidad de vida de las personas y sus familias cuando enfrentan problemas físicos, psicológicos, sociales o espirituales inherentes a una enfermedad potencialmente mortal. Buscan prevenir y aliviar el sufrimiento, proporcionar alivio del dolor y otros síntomas, afirmar la vida y considerar la muerte como un proceso natural, integrando los aspectos espirituales y emocionales del cuidado. Además, se anticipa a la situación final, la muerte, a través del registro de voluntades anticipadas, proceso en el que la persona expresa cómo quiere vivir sus últimos momentos, y qué desea que se le realice o no desde el ámbito de los cuidados y tratamientos”.
“Durante 2024, 1.700 personas ingresaron a programas de cuidados paliativos oncológicos y no oncológicos en Ñuble, mientras que en lo que va de este año la cifra alcanza 1.111 personas, de las cuales 755 corresponden a cáncer y 356 a cuidados paliativos universales. Cada una recibe asistencia integral, ya sea ambulatoria, domiciliaria u hospitalaria, con registro y seguimiento clínico para asegurar calidad y continuidad de atención. La ley asegura el respeto a la dignidad, autonomía del paciente y derechos asociados a la toma de decisiones, la compañía familiar y el acceso a información comprensible sobre su salud y tratamientos disponibles”, agregó la facultativa.
¿Cómo acceder?
Las personas que enfrentan enfermedades avanzadas, oncológicas o no oncológicas, pueden acceder a través de su centro de salud familiar u hospital. En el caso del cáncer avanzado, el ingreso se realiza mediante la garantía GES, mientras que las patologías no oncológicas se incorporan al Programa de Cuidados Paliativos Universales del Minsal.
El pasado sábado 11 de octubre se conmemoró el Día Mundial de los Cuidados Paliativos, bajo el lema “Cumplir la promesa: acceso universal a los cuidados paliativos”, un llamado de la Organización Mundial de la Salud que busca visibilizar la urgencia de aliviar el sufrimiento y garantizar una atención compasiva e integral a lo largo de toda la vida.