Cuba calificó como “calumniosas” las sanciones anunciadas este jueves por Washington contra su ministro de Defensa y negó que en la isla haya habido “un acto de represión contra el pueblo” durante las protestas del 11 de julio.
Estados Unidos impuso el jueves sanciones financieras al ministro de Defensa cubano, Álvaro López Miera, y a una unidad antimotines por la “represión” de las recientes manifestaciones populares en la isla.
Pero el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, aseguró que “aquí no ha habido un acto de represión contra el pueblo cubano como no ha habido ningún estallido social”.
La sanción, dijo el canciller en conferencia de prensa, es “irrelevante” porque “me consta que ese ministro no tiene cuentas en bancos norteamericanos y nunca me ha dicho que esté interesado en ir a hacer turismo a Miami“, pero es “relevante a partir de la implicación política agresiva”.
Al grito de “tenemos hambre”, “abajo la dictadura” y “libertad”, miles de cubanos protestaron el 11 y 12 de julio en más de 40 ciudades del país, en medio de la peor crisis económica de la isla en décadas y de un fuerte aumento de los contagios por covid-19. Las protestas dejaron un muerto, decenas de heridos y más de un centenar de detenidos.
El canciller declinó dar la cifra de detenidos durante las manifestaciones, pero señaló que la mayoría han sido liberados y que no hay ningún menor de edad en prisión, además de asegurar que en todos los casos se ha respetado el debido proceso con asistencia de abogados.
“Refuto, no hay juicios sin las garantías del debido proceso”, indico.
“Se han publicado listas de personas desaparecidas, aquí declaro que son absolutamente falsas y rechazo que haya incluso un solo caso”, enfatizó, ante las múltiples denuncias que se han conocido en las redes sociales, de detenidos y de personas no localizadas.
El presidente estadounidense Joe Biden u otro funcionario de su gobierno “no tiene absolutamente ninguna autoridad moral para pedir que se libere a personas detenidas en Cuba”.
Poco antes, había señalado en Twitter que Estados Unidos “debería aplicarse a sí mismo la Ley Global Magnitsky por los actos de represión cotidiana y brutalidad policial que costaron 1.021 vidas en 2020”.