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Una crisis de abastecimiento de materia prima (trozos de pino radiata) comenzó a golpear a las pymes madereras de Maule, Ñuble y Biobío, debido a una baja de 50% en los predios de pequeños y medianos forestadores (290 mil hectáreas menos) entre 1998 y 2016, por la sustitución de pino por eucalipto -que se destina a celulosa-, y el término de la vigencia del DL701 de fomento forestal, con tasas de forestación muy bajas en igual periodo.
Así lo planteó José Pablo Undurraga, gerente de Chile Timber y del Programa Madera Alto Valor de Corfo, quien recordó que “tras los incendios forestales de enero de 2017 se anticipó en cuatro años un déficit que el Instituto Forestal (Infor) había proyectado, pero pocos fueron capaces de enfrentar la crisis que se venía”.
Según cifras del Infor, en Ñuble se producen 1.223.890 metros cúbicos de madera aserrada anuales, equivalentes a un 15% del total nacional, en un total de 84 aserraderos que generan 1.932 puestos de trabajo directos.
No obstante, Undurraga advirtió que “el potencial de las regiones del Maule, Ñuble y Biobío en aserrío se están viendo afectadas” por esta merma en el abastecimiento.
“Hoy, en 2019, la conclusión es un problema estructural del sector maderero para abastecer trozos de pino radiata en Ñuble con déficit crónico de 20% por más de 20 años que afectará a parte importante de la matriz de aserraderos pequeños y medianos”, expuso el profesional.
Anticipó que “en un escenario optimista, el primer efecto es una caída de al menos un 14,6% en la producción nacional de madera aserrada de pino radiata, que se explica por 2,5 millones de metros cúbicos de trozos menos de consumo a las Pymes aserraderos, comprometiendo la operación de aserraderos en el período 2019-2021, generando una pérdida de empleos, descontento social y un golpe a la economía territorial en estas tres regiones”.
De hecho, en Ñuble ya se ha verificado el cierre de algunas plantas y la reducción de turnos en otras.
Cambio de modelo
Undurraga planteó que “la solución no se construye consiguiendo más abastecimiento de pino radiata u otra especie, sino gatillando un cambio en el modelo de negocios para las Pymes aserraderos, que se acompañe de diversificación de maderas a procesar, y con foco en el valor agregado”.
Explicó que “esto implica incentivar un cambio estructural en el modelo de negocios (construcción en madera, biomasa, productos de nicho) de la Pyme que permita tener disposición a pagar por trozos de pino radiata más caros, para asegurar un período de transición entre 5 a 10 años para incorporar otras maderas al negocio, y así, dar opción de independencia de abastecimiento. A mediano plazo, implica incentivar el consumo de especies con stock disponible a la matriz productiva y manejo de bosque nativo”.
Para este desafío, destacó que el Programa Madera Alto Valor de Corfo está organizando por segundo año consecutivo el “Encuentro empresarial de la Pyme maderera” Epyma Ñuble 2019, que se realizará el 11 de julio a partir de las 14.30 hrs. en Inacap Chillán, y que contará con la participación del intendente Martín Arrau y del gerente del Infor, Álvaro Sotomayor.