Han pasado 26 días exactos desde el inicio de la emergencia por los incendios forestales. Extensas jornadas donde la situación, por momentos, fue crítica. Nunca antes se había vivido una emergencia tan cuantiosa en la región, la primera además desde que Ñuble se separó de Biobío. El tema primordial, luego de ya pasada la emergencia, es la reconstrucción, que ya empezó a gestarse en las comunas más afectadas, con la llegada de bonos, ayudas financieras y la entrega de las viviendas de emergencia. Eso es tema a corto plazo, pero la situación a largo plazo viene de la mano con el problema que mucha gente y expertos han mencionado: La regulación de las plantaciones forestales y su rol en estos incendios.
Mucho se ha debatido al respecto y la mayoría de expertos concuerdan en que se debe regular el uso de suelo y mantener a las viviendas alejadas de los predios forestales, que muchas veces están encima de las casas, lo que dificulta el trabajo y disminuye el tiempo de reacción ante la llegada de las llamas y en el peor de los casos, son estas viviendas las que sufren las consecuencias. Esa es la problemática. Ahora ¿cuál sería la solución? Desde el gobierno ya ofrecieron la disposición a dialogar y establecer mesas para que a futuro esto no vuelva a pasar. Lo dijo el mismo presidente Boric en su visita a la zona.
En esa línea, el Gobierno Regional de Ñuble apunta a trabajar para que la planificación territorial pueda desarrollarse de una manera que las viviendas y predios forestales no deban estar tan cerca. De esa forma, se puede contar con una preocupación menos, que es la afectación directa a las casas.
Este no es un tema menor. Si bien al comienzo de la emergencia la problemática inmediata era extinguir las llamas, ya a casi un mes del inicio de la alerta roja, este asunto ahora está en la palestra de expertos, políticos y miembros de gobierno que tienen dentro de sus agendas discutir el tema directamente con los agentes privados y llegar a un consenso. Así lo comentó el gobernador Óscar Crisóstomo el pasado jueves ante la visita de la delegada presidencial para la reconstrucción en la zona, Paulina Saball.
El jefe regional destacó que la delegada le comunicó que “próximamente saldrá un plan de Contraloría” en cuanto al tema de la prevención y del ordenamiento territorial, para que este sea “vinculante” en beneficio de estas zonas, a fin de estar más preparados, lo que cobra especial relevancia puesto que el Gobierno Regional no tiene grandes potestades para regular y establecer un ordenamiento que sea acorde a las necesidades del territorio en cuanto a una eventual emergencia por incendios.
Al ser consultado, Crisóstomo anunció que “nos reuniremos con los gobernadores de las tres regiones más afectadas para tener una conversación profunda con el gobierno central en cuanto a estas medidas que son más de fondo. Claramente, si tuviésemos mayores facultades las hubiésemos ejercido, pero hoy estamos esperando que salgan de Contraloría los planes de regulación de ordenamiento territorial, que en muchas materias son vinculantes y en otras, no. Vamos a ver cuál va a ser el documento final que va a salir, le hemos pedido al contralor nacional apurar ese proceso, porque nos permitiría en esta contingencia poder evaluar cuáles van a ser los territorios y una vez que tengamos eso, también nos vamos a sentar junto con actores clave de la región”.
En esa línea, el gobernador comentó que no tan solo se reunirán con agentes públicos, sino que también con el mundo privado. Crisóstomo mencionó que quieren establecer una conversación “franca, fraterna y con mucha claridad” con Corma, “en términos de lo que está pasando en nuestra región”.
Iniciativas inmediatas
La iniciativa por parte del Gobierno Regional y su Consejo, viene a dar solución también al llamado plan de ordenamiento territorial, que viene a regular también el uso de suelo.
Como manifestó el gobernador, están a la espera de que Contraloría pueda evacuar prontamente el reglamento. Dicho proyecto tiene directo beneficio en las zonas rurales, puesto que los planes reguladores muchas veces solo vienen a establecer ordenamientos netamente a las zonas urbanas.
El consejero Arnoldo Jiménez resaltó que este proyecto “puede establecer una regulación referente a los territorios y obviamente, también resguardar a la comunidad”. Si bien comentó que es un proyecto “complejo de realizar, porque deben participar varios ministerios”, están a la espera del reglamento para ver cómo se “echa a andar”.
Por otra parte, comentó que es un tema que va a tener aún más fuerza por la contingencia de los incendios, por lo que esperan que el proceso se resuelva lo más rápido posible. En esa misma línea, se espera también que se establezca un anillo de protección entre las casas para que el fuego, ante un eventual incendio, no llegue a las viviendas. Si bien los cortafuegos cumplen en parte esta eventualidad, la realización de estos, por lo general, se realizan al momento de la emergencia y en muchos casos quedan pequeños, por lo que las llamas avanzan de igual manera. Es por eso que la conversación con las forestales también se hace importante, para analizar todas las situaciones que se producen en estos siniestros y las autoridades, tanto regionales como nacionales, ya comprometieron una conversación para pronto llegar a un consenso en esta materia.
“Conozco el tema y las forestales se han sentado a la mesa en algunos casos, ahí está el problema, debe haber una regulación y está la voluntad, así que nos sentaremos a conversar”, comentó Jiménez.
A la resolución de Contraloría, que en parte tiene como objetivo regular la situación del ordenamiento territorial, se suma una medida que será presentada la próxima semana por consejeros regionales. Esta se trata de establecer límites entre las viviendas y predios de monocultivos, proyecto que quiere empezar a instaurar desde ya esta nueva disposición para que hechos como los ocurridos en las comunas de la región no vuelvan a suceder, o si ocurren, que estos no alcancen a llegar a las viviendas y dar más tiempo de reacción para la extinción de las llamas.
Al respecto, el consejero Iter Stuardo fue tajante al decir que por el momento “no existe un plan en esta materia, en parte, porque somos una región nueva y propiamente tal no tenemos un plan específico al respecto”. Sobre eso, Stuardo mencionó que “nosotros, como bancada, vamos a reunirnos la próxima semana para poder establecer junto con el gobernador algunos lineamientos específicos con respecto a este tema. Hasta el momento no hemos tenido la oportunidad de reunirnos y estamos preparando con la consejera Lorena Vera un documento para poder regular y proponer un plan de acción con respecto al tema de las empresas forestales”.
En concordancia, el consejero detalló que quieren establecer una cierta cantidad de metros de distancia con respecto a predios de monocultivos, lo que aumentaría la capacidad de reacción al momento de un incendio forestal. “Yo estuve ahí, estuve junto con bomberos y vecinos tratando de defender las viviendas y pasa que estos predios estaban a 10 metros, es imposible proteger las casas. Queremos establecer, si la ley nos permite, y ahí debemos verlo con nuestros asesores jurídicos del Gobierno Regional, a lo menos 50 metros de separación con estos predios, porque eso da capacidad de reacción, de tener gente y controlar el incendio”.
Ordenamiento territorial
Hace un par de semanas el Colegio de Arquitectos de Chile se pronunció respecto al ordenamiento territorial y estructural que existe en Chile en cuanto a la convivencia cercana entre viviendas y predios forestales. En la declaración, se dieron a conocer ocho propuestas para una mejor distribución entre forestales y viviendas. Entre las medidas, por ejemplo, se encuentra la propuesta de que existan cortafuegos perimetrales de un rango entre 50 a 100 metros, lo “que puede diseñarse como una propia infraestructura vial o explanadas limpias sin vegetación, con limpieza en invierno y previa al verano. Lo que además, puede generar empleos locales en la propia comunidad de áreas forestales productivas”.
En cuanto al ordenamiento territorial, se plantea que “los planes reguladores en cualquier escala de planificación no pueden definir áreas de expansión urbana limitando con masas forestales, sin un resguardo de cortafuego”.
Al respecto, el presidente regional del Colegio de Arquitectos, Celso Monsalve, destacó que estas medidas son las “más acertadas”, ya que a partir de “la magnitud de los eventos y de la extensión de las plantaciones forestales, urgen estudios que conduzcan a una normativa ambiental y de planificación territorial que minimicen los impactos de este tipo de siniestros”.
Se está a la expectativa que durante la próxima semana comiencen a gestarse los proyectos que buscan ordenar, regular y establecer ordenanzas que permitan a las personas vivir tranquilas, sin la preocupación que ante un incendio forestal, este pueda propagarse a sus casas, en una región en donde se estima que hay comunas en donde el 70% de su superficie total corresponde a predios forestales. Una discusión que está lejos de terminar, pero que al menos busca, por el momento, establecer medidas para que estos hechos no vuelvan a suceder.