Superar las deficiencias técnicas y sanitarias para poder sesionar, y comenzar a discutir cómo se confeccionará el reglamento, base del trabajo constitucional de fondo; es la meta que tiene a partir de mañana la convención constitucional.
Si bien esta pudo instalarse el pasado domingo, gran parte de la discusión inicial se la llevaron dos temas: las dificultades técnicas, que incluso llevaron a la salida del secretario ejecutivo, Francisco Encina; y la elaboración de una declaración en favor de los detenidos del estallido social, punto que fue cuestionado por los constituyentes de Chile Vamos -y de otros sectores, como independientes y de la Lista del Apruebo-, por considerar que no era resorte del órgano pronunciarse sobre el particular, y por estimar que “habían sido elegidos para redactar una nueva Constitución”.
Es más, de los cinco constituyentes de Ñuble, tres votaron en contra: Martín Arrau y Margarita Letelier, de Chile Vamos; y Felipe Harboe, de la Lista del Apruebo.
Los independientes César Uribe y Carolina Sepúlveda, en tanto, si bien tuvieron diferencias respecto de cuál, propuesta de declaración respaldar, terminaron coincidiendo en la que finalmente resultó aprobada.
Terminado el trabajo el día jueves, la presidenta, Elisa Loncón, informó que se retomarían las sesiones del pleno este martes 13, a las 9.30, pues debía habilitarse el sistema de votación electrónica.
La situación no gustó mucho a constituyentes como Martín Arrau, quien incluso solicitó formalmente a la mesa que se implemente un horario laboral de 45 horas semanales, “al igual que todos los chilenos. No podemos tener privilegios, debemos ser parte de la solución y no del problema”, dijo.
¿Qué se ha hecho hasta el momento?
De acuerdo al trabajo desarrollado por Foro Constituyente UdeC, que está realizando un seguimiento de la labor de la convención, el cual se puede consultar en foroconstituyente.udec.cl , lo realizado por el órgano durante la semana recién pasada fue, en primer término, instalar la convención, el pasado 4 de julio.
Durante esa jornada, si bien la sesión de instalación debió ser suspendida de forma momentánea, producto de algunos incidentes que se registraron en las inmediaciones del edificio del ex Congreso Nacional; se procedió a la elección de la mesa directiva, siendo Elisa Loncón (constituyente por el pueblo mapuche), elegida presidenta del órgano constituyente por 96 votos (en segunda votación).
En tanto, el convencional Jaime Bassa (Distrito 7), fue elegido vicepresidente por 84 votos (en tercera votación).
Antes de finalizar la sesión se tomaron los siguientes acuerdos: la mesa directiva convocó a los convencionales a una segunda sesión para el día lunes a las 15.00 horas, y los días sucesivos, a las 10.00 horas.
También manifestó la necesidad de tomar una postura frente a las personas detenidas durante el estallido social y la conveniencia de avanzar en el reglamento interno de la convención, en su autonomía jurídica, en el traspaso de competencias, y en la necesidad de ampliar la mesa a cinco ó siete integrantes.
Un grupo de convencionales feministas entregó a la mesa una propuesta de Reglamento, al igual que la convencional Constanza Hube, perteneciente a Chile Vamos.
Los días lunes 5 y martes 6, la convención no pudo funcionar, debido a que el recinto del ex Congreso Nacional no contaba con las condiciones técnicas y sanitarias requeridas.
Durante la segunda sesión, el miércoles 7 de julio, se anunciaron algunas medidas, como suspender las licitaciones iniciadas por el Gobierno y aumentar el control sobre la ejecución del presupuesto.
La mesa recordó a los convencionales que deben actualizar su declaración de patrimonios e intereses en un plazo máximo de 30 días, así como también recalcó que se encuentran sujetos a la Ley del Lobby.
Luego de una compleja votación, debido a que aún no se implementaba el sistema electrónico, se amplió la mesa directiva de cinco a nueve integrantes (dos escaños reservados para convencionales pertenecientes a pueblos originarios); y se tomó el acuerdo de crear algunas comisiones provisorias: de Reglamento (para diseñar una propuesta de Reglamento); Presupuesto y Administración Interior (para autorizar las licitaciones, gastos y compras que se deseen realizar en nombre de la convención Constitucional; y Ética (para prevenir y sancionar las desavenencias y faltas de respeto entre los convencionales).
Se anunció también por parte de un grupo de convencionales de Chile Vamos una eventual reclamación ante la Corte Suprema por infracción a reglas de procedimiento, la cual debe ser suscrita por un cuarto de los convencionales en ejercicio.
Finalmente, durante la sesión del jueves 8 de julio, se aprobó la declaración denominada “La Convención Constitucional a los Órganos del Poder Constituido sobre la prisión política en Chile y la militarización del Wallmapu”, propuesta que obtuvo 105 votos a favor, 34 en contra y 10 abstenciones.
Entre los principales puntos de la declaración están que se tramite el proyecto de ley de Indulto General con la máxima celeridad; darle suma urgencia al proyecto de ley de Derechos Humanos; retiro de todas las querellas interpuestas que invocan la Ley de Seguridad del Estado; la inmediata desmilitarización del Wallmapu; aplicación directa y obligatoria del Convenio número 169 sobre Pueblos Indígenas y Tribales de la Organización Internacional del Trabajo y la Declaración de Naciones Unidas sobre Derechos de los Pueblos Indígenas; que se garanticen los derechos de las personas privadas de libertad de origen indígena; y la implementación de una política robusta de justicia, que contribuya a la reparación integral de los perjuicios y los daños sufridos, de forma individual y colectiva.
