Señor Director:
Es un hecho que la contaminación atmosférica puede ejercer efectos dañinos sobre la salud de las personas a corto y largo plazo; lo cual puede favorecer las crisis respiratorias en la población y que actualmente es más complejo debido a la presencia del Coronavirus.
La principal medida para la prevención de las enfermedades respiratorias crónicas es no fumar y no estar expuesto al humo de tabaco. No obstante, tenemos un gran desafío, ya que en los últimos años pocas enfermedades han supuesto un problema de salud pública mundial y nacional, como lo son las enfermedades respiratorias crónicas, especialmente EPOC y asma.
La urgencia del llamado es a mejorar los aspectos no solo preventivos de dichas patologías, activando, por ejemplo, la actual Ley de Tabaco entrampada en el Congreso, dar acceso gratuito a terapias farmacológicas para cesación del tabaco y fortalecer las estrategias de pesquisa precoz, seguimiento y nuevos tratamientos para los mismos.
María Guacolda Benavides
Dra. Broncopulmonar Adulto, Instituto Nacional del Tórax