Señor Director:
Un reciente informe de la OCDE indica que en 2020 Chile ocupó el último lugar en el indicador de confianza en el gobierno nacional, llegando solo a un 17.1%. En cambio, el año 2006 la misma medición reportó un índice de 58.1%, créalo o no, estábamos por sobre países como Austria, Bélgica, España, Estados Unidos, entre otros.
El gran desafío del próximo gobierno será justamente reconstruir la confianza pública porque sin ella no es posible la sostenibilidad y la gobernabilidad presente y futura. Nuestra crisis social también es una crisis de confianza, modernizar el aparato público en función de un gobierno abierto, fiscalizador y promotor de la equidad, es esencial en cualquier programa político de quien se candidatea a un cargo público. Pero ¿y si no está?, entonces me permite un consejo: desconfíe.
Carlos Rungruangsakorn
Académico e investigador UACH