Una pena efectiva de cárcel de siete años y 184 días deberá cumplir un hombre de 25 años de edad, quien fue condenado hoy en un juicio abreviado por diversos robos a choferes de camiones y a empleados de una plaza de peaje, ocurridos en Ñuble.
Los asaltos, en los que participó junto otros cómplices, le reportaron al imputado un botín superior a los $10 millones en efectivo.
El fiscal Álvaro Serrano, de la Unidad de Análisis Criminal de la Fiscalía de Ñuble, llevó a juicio a Bastián Quintana Valenzuela, por cuatro robos con intimidación y violencia a conductores de camiones repartidores de bebidas, ocurridos en enero de 2020 en Chillán. También lo acusó por el asalto a dos trabajadores de la plaza de peaje Nueva Aldea, perpetrado en marzo del mismo año.
“El imputado formaba parte de una agrupación criminal que se dedicaba a cometer robos que afectaron, principalmente, a conductores de vehículos de carga”, explicó el fiscal Serrano.
El persecutor también destacó el trabajo investigativo realizado por detectives de la BIRO de la PDI de Chillán, que permitió identificar Bastián Quintana, y reunir las evidencias que sustentaron su condena.
