Señor Director:
El pasado miércoles se expusieron en la Comisión de Derechos Fundamentales de la Convención Constitucional los argumentos de la iniciativa “Con mi plata no”, instancia en que la vocería de la agrupación afirmó que “En el reparto, los jóvenes aportan a las pensiones de los jubilados actuales, pero cuando ellos jubilen, nadie les garantiza que vaya a haber fondos suficientes para tener una pensión digna”.
Al respecto, considero relevante reflexionar sobre algunos aspectos de esta declaración. Por una parte, es una falacia considerar que con el actual sistema de capitalización no existe una dependencia intergeneracional, por cuanto inevitablemente los jubilados venden sus activos financieros para obtener liquidez (sus pensiones) a los actuales trabajadores, quienes prescinden de una parte del consumo para comprar dichos activos financieros. Por ende, el tema no está en la dependencia intergeneracional, sino en la mercantilización de las pensiones.
Conjuntamente, cabe destacar que la discusión constitucional está apelando a dos concepciones de justicia diferentes, por cuanto, la iniciativa “Con mi plata no” hace mención a la justicia conmutativa, entendida como una relación de igualdad entre lo que se da y lo que se recibe a cambio, mientras que la postura a favor del reparto se vincula con la idea de la justicia distributiva o equidad, la cual reconoce las diferencia entre los más y los menos aventajados.
Romper con estos “mitos” entorno al reparto y a la capitalización es vital para hacerle frente los desafíos que nos plantea la Seguridad Social, no sólo de cara envejecimiento demográfico o al monto que esperamos recibir durante esta etapa de nuestras vidas, sino que también desde cómo nos haremos cargo de los mayores a futuro.
Verónica Wagner Guillot
Cientista política