Señor Director:
Este año nuestro país ha figurado con mucha frecuencia entre los titulares noticiosos alrededor del mundo debido al momento político, las elecciones, al manejo del COVID y las vacunas, entre otros temas que por lo general delatan posiciones divergentes.
Pero esta semana, Chile volvió a ser noticia mundial por un tema que genera gran consenso: Albergó la cumbre global de energías limpias más importante del mundo, la CEM12/MI-6 (Clean Energy Ministerial y Mission Innovation Ministerial). Y sus conclusiones no pueden ser más alentadoras.
Y es que en este evento virtual no solo participaron destacados líderes mundiales como John Kerry o Bill Gates, sino que también sirvió para demarcar un camino claro y sólido en cuanto a la descarbonización de las próximas décadas, todo ello basado en el desarrollo y consumo de energías limpias en todos los lugares del mundo.
La buena noticia es que Chile ya tiene varios peldaños recorridos en esta industria. Solo a nivel interno, la capacidad instalada de ERNC en la matriz se acerca al 30%, con un 17% de aporte en energía solar, mientras que la energía térmica ya es menos de la mitad[i].
El contexto mundial indica que la demanda por contar con energías limpias e hidrógeno verde aumentará, y Chile cuenta con todas las herramientas para seguir avanzando e incluso ¿Por qué no? Ser un exportador de ERNC. Durante toda su historia nuestro país ha sustentado su desarrollo en grandes pilares, como fue el salitre y luego el cobre. Pero hoy muy posiblemente estamos escribiendo una nueva era basada en energías limpias.
Víctor Opazo Carvallo CEO de Solek Chile