Señor Director:
Considerando que el Mineduc adelantó las vacaciones escolares que ya terminaron y, por ende, acortó los días de clases efectivos de este año, es fundamental retomar las actividades con una jornada escolar completa, ya que es la única forma de recuperar el aprendizaje y las habilidades sociales perdidas en pandemia.
Además de lo anterior, la jornada escolar completa permite que los alumnos almuercen con seguridad las raciones brindadas por Junaeb, ya que con media jornada son pocos los que se quedan para estos efectos, resultando también positiva para que sus padres y apoderados puedan desarrollar normalmente su vida laboral.
Si se afirma lo contrario en pos de “prevenir” una escalda viral, es esencial señalar que en el primer semestre los colegios que funcionaron en esta modalidad no tuvieron una mayor cantidad de contagiados versus los de media jornada; y respecto a infraestructura, en la educación particular subvencionada, a pesar de recibir menos recursos del Estado, nuestros afiliados se preocupan permanentemente de la adecuada mantención de los establecimientos, incluso trabajando con el personal de servicio en la semana extra de vacaciones.
Nos gustaría ver que cuando otras voces, ajenas a la autoridad sanitaria, abogan por continuar la flexibilización de la jornada escolar, su preocupación se centre en la importancia de los procesos de aprendizaje y especialmente a mejorar la calidad de la educación. Solo así se contribuirá a cerrar la brecha educacional que hoy afecta a nuestro país.
Profesora Angélica Misa F.
Directora de la Coordinadora de CCPS.