Con solo 20 años, Catalina Sandoval Jarpa, estudiante de Ingeniería Agrícola (Inacap) se convirtió en la edil más joven de la historia del Concejo Municipal de Chillán.
“Una de mis características principales es que soy deportista, desde el atletismo hasta los deportes más emergentes como los deportes en contacto con la naturaleza, ya sea escalada, andinismo, rapel o el autodescenso, involucrando la actividad física, la educación física y la educación ambiental con proyectos sostenibles para el medio ambiente con huertos urbanos y educativos, desarrollando prácticas sustentables en el tiempo”, dice a modo de introducción.
En su partido destacan su energía, carisma y determinación, además asegura que lo que la motivó a ser concejal fue el poder “refrescar los nombres y los partidos de siempre, aportar juventud, ideas nuevas y mucha energía al concejo y la comuna. Quiero trabajar apoyando proyectos para jóvenes, y fiscalizando que los programas y los fondos que hoy se destinan a ellos sean bien utilizado”.
Respecto a ser un rostro nuevo, lo asume como “una responsabilidad súper grande hacerlo bien con mi edad, porque después de lo mal que lo ha hecho este Gobierno que vendió la juventud como un atributo, gran parte del país piensa que somos incapaces de hacerlo bien, y eso es falso”. Quiere dirigir la comisión de Deporte, Medio Ambiente o incluso la de Turismo, “dada la experiencia que tengo con mis estudios, certificaciones y carrera profesional. Mi aporte será hacer bien la pega y trabajar para que los proyectos y recursos destinados a jóvenes, sean bien ejecutados, de manera transparente y efectiva”.