Contribuir a la disminución de los campamentos existentes en el país y prevenir la formación de nuevos asentamientos precarios, son parte del trabajo colaborativo que está realizando el Ministerio de Vivienda y Urbanismo junto a la Cámara Chilena de la Construcción.
La aplicación de este convenio, que busca desarrollar estrategias en conjunto que permitan dar una solución habitacional efectiva a las familias que habitan en ellos, fue priorizado en cuatro regiones del país, entre ellas Ñuble.
“Ñuble junto a las regiones de Tarapacá, Antofagasta y Valparaíso fueron escogidas como plan piloto para la aplicación de este convenio. En nuestro caso ya vamos en la quinta mesa de trabajo, en el marco de los asentamientos precarios que tenemos en nuestra región”, señaló el seremi de Vivienda y Urbanismo de Ñuble, Carlos Urrestarazu.
El Minvu abordará este desafío a través de su Programa de Asentamientos Precarios, mientras que la CChC lo hará a través de la realización de estudios, informes e indicadores cuantitativos a fin de elaborar diagnósticos, metodologías y herramientas para superar los campamentos.
Dependiendo de la estrategia de intervención que el ministerio determine para las familias de campamentos, a través de relocalizaciones, radicaciones a través de urbanizaciones, o radicación con construcción en el mismo territorio del asentamiento, la Cámara Chilena de la Construcción, colaborará a través de la participación de sus asociados, en la concreción de proyectos habitacionales y en la agilización de los mismos.
Según el catastro elaborado por el Ministerio de Vivienda, en 2018 fueron contabilizados 822 campamentos en el país, mientras que, en la región, de acuerdo al último catastro, los asentamientos irregulares aumentaron de 12 a 21 en los últimos 7 años, desde el 2011 al 2018.
